lunes, 31 de enero de 2022

Casi no puedo dormir por esa mierda del MIR


Veo en el telediario que este año las personas que hayan dado positivo en Covid no podrán presentarse a los exámenes MIR y PIR (para médicos y psicólogos), y que tendrán que esperar a la convocatoria del año que viene. El Ministerio de Sanidad no ha previsto protocolos para ellos. Me quedo totalmente horrorizada, no entiendo nada.

De todas las estupideces que he visto hacer a nuestras autoridades en estos dos años de pandemia, y han sido muchas, puede que ésta sea de las más gordas, de las más injustas, de las más demenciales y de las más escandalosas. Y merecería que saliéramos todos a la calle como basiliscos a protestar por tan tremenda barbaridad. Pero no lo haremos, no lo haremos porque los perjudicados son unos cuantos empollones que nos importan una mierda.

Ésa es la triste realidad. Que esta noticia no esté en las portadas de todos los periódicos y que las redes sociales no estén incendiadas por este asunto y sí lo estén en cambio por la canción elegida para representarnos en Eurovisión... clama al cielo. Pero qué clase de mastuerzos somos? Qué clase de sociedad de gilipollas hemos creado?

Cuando yo digo que ésta es una especie en extinción es por cosas como ésta. Es que no podemos sobrevivir de ninguna manera, es que lo mejor es irnos al carajo y cuanto más pronto mejor.

Vamos, que para unas elecciones autonómicas se habilitan protocolos especiales para que puedan ir a votar las personas que hayan dado positivo en Covid, pero para un examen que esas criaturas llevan todo el año preparándose... y hablo de criaturas que tienen unas notarráncanas en el bachillerato, que se han chupado una carrera de seis años, que llevan toda la vida estudiando para ese momento, que llenan las bibliotecas desde la mañana a la madrugada sin levantar cabeza... para esta gente no hay protocolos. Sólo hay un "vuelva usted el año que viene"?

Me subo por las paredes, me tiro de los pelos, se me calienta la sangre y el corazón se me pone a mil. Qué clase de sociedad puede permitir esto sin inmutarse? Pero qué coño tenemos corriéndonos por las venas?

Hoy mismo una amiga me ha dicho que para cuándo un post sobre lo de Eurovisión. Y lo entiendo, posts mucho más chorras he escrito sobre temas de lo más inanes y estúpidos. De hecho soy una auténtica experta en escribir sobre chorradas. Pero es que cuando pienso en estas pobres criaturas, en las que nadie parece pensar, de las que nadie parece acordarse, de verdad, se me quitan las ganas de escribir sobre nada más.

No merecemos nada como sociedad si no nos rebelamos contra este tipo de tropelías. He estado unos meses trabajando en la biblioteca de la Facultad de Medicina y he visto a esos muchachos no levantar la cabeza de sus libros y de sus pantallas. Horas y horas, meses y meses. Muchos de ellos durante la pandemia han sido voluntarios y se han jugado la vida por todos nosotros. 

De verdad no nos importa esta gente? Nadie piensa en que son los que nos tienen que curar algún día?

Definitivamente no merecemos la pena. Extingámonos alegremente, por el bien del planeta.

Me ha salido panfilón pero lo quiero un montón

- Tú qué necesitas? 

- Yo un abrigo y un par de sudaderas.

- Vale, te hago un bizum de 100 pavos, que con eso tienes de sobra pa las rebajas.

- Y lo que me sobre me lo puedo gastar en el "Aquí no hay quien beba"?

- Bueno, ya lo vemos. No creo que te sobre mucho.

- Vale, pero si me sobra.

- Bueeeeeeno. Venga, vamos al lío. Cada cual por su lado y cuando acabemos nos vemos en el Mercao Victoria pa tomarnos una cervecita.

- OK.

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- Qué pasa? Qué haces aquí fuera? No te veo ninguna bolsa. No te has comprao na?

- No.

- Venga ya! Pos yo me he hinchao, menos mal que acabo de cobrar porque le he pegao un tute a la tarjeta que pa qué.

- Pos lo mío es pa inflarme a hostias.

- Pero qué te ha pasao?

- Que encima de que no me he comprao na me he gastao casi 20 euros en un paquete de pañales.

- Qué diceeeeees????

- Que sí, que un tío me ha colao la gamba y me ha pedío que le compre pañales. Y yo no sabía lo que valían.

- Madre míaaaaaa! Pero tú eres un pringao!

- Ya, ya lo sé. No hace falta que me lo digas. Llevo dos horas dándole vueltas, hasta me he venío porque ya no tenía ganas de ir de compras ni na.

- Ayyyyyy, mi niñoooooo, si es que eres todo corazón!

- Venga ya, mamá, que me han timao!

- Ya, eso está claro, pero con lo grande que eres cómo has caído? Te ha tenío que ver una cara de pardillo! Tú no sabes que ahora ya no te piden dinero, que te piden cosas y luego ellos las venden?

- Pos eso no es lo peor.

- Ay madreeeeee!

- Lo peor es que cuando me ha pillao ya llevaba un par de bolsas de pañales más en la mano.

. Llevaba más bolsas y has caídooooooooo??

- Yo qué sé, mamá! He pensao que a lo mejor tenía un montón de chiquillos, y además no sabía lo que costaban. Yo qué sé lo que cuestan los pañales! Pensaba que como mucho 10 euros. Y cuando he visto lo que era ya no me podía echar atrás.

- Pos ya lo sabes. Está bien la lección para que no vayas dejando semillitas desperdigadas por ahí. En fin, bueno, no te machaques tontamente. El tío te ha visto cara de pardillo y ha ido a por ti. Si cuela bien y si no a por otro. No pasa na, más se perdió en Cuba. No nos vamos a arruinar por eso.

- Pero es que eso no es lo peor.

- Por favoooooooor! Qué más te ha pasao?

- Es que soy todavía más pringao. Es que la muchacha de la caja me ha intentao advertir. Cuando he llegao con el tío y con los pañales me ha hecho así con la cabeza (negación), y yo me he dao cuenta pero ya no era capaz de echarme patrás. Y luego cuando he visto lo que era... (puchero)

- Ay mi niño! Si es que se te ve en la cara la pardillez. Desde luego el tío ha ido a tiro hecho. Pero bueno, piensa que antes que tú ya habían caído otros dos como mínimo. Mal de muchos consuelo de tontos, pero consuelo al fin y al cabo.

- Llevo un montón de rato aquí sentao machacándome. No se puede ser más gilipollas.

- Sí que se puede. Yo he hecho gilipolleces más gordas, palabrita. Anda, venga, vamos a tomarnos esa cervecita fresquita que quita las penas y mientras compramos por Internet lo que te haga falta.

- Vale.

- Tú sabes que esto tiene un post, verdad?

- No, por favor, mamá!

- Sí, lo tiene. Son las cosas de la vida, tengo necesidad de contarlas.

- Bueno, la verdad es que me da igual. Pero a mí no me lo enseñes. Y a nadie de la familia, porfi. Total, aparte de nosotros no te lee nadie.

- Eso te crees tú. Alguna gente me lee.

- Ya, pero son cuatro monos, y además no me conocen.

- Eso es verdad.  Entonces me das tu consentimiento?

- Bueeeeeeeeno.

- Piensa que esos 20 euros eran míos. Este post está pagao con creces.

- Bruja!

domingo, 23 de enero de 2022

Mis pequeños brothersitos, esos locos ovulitos

Les he regalado a mis polluelos por Navidad un tatu de hermanos. Lo hemos llamado "Brothersitos". Me ha gustado tanto que he colgado en mi perfil de guasap la foto de sus brazos mostrando el tatu.

Lo voy a describir para que os hagáis idea. Son unas piezas de puzzle unidas. Cada cual ha puesto en la suya lo que cree que le define. Julia, la intelectual de la prole, ha puesto en la suya una Psi, que es la letra griega que simboliza la Psicología, y de fondo un cerebro. En fin, ya sabéis que es un cerebrito ella en sí misma. Luis, como no podía ser menos, dado que se dedica al oficio balompédico, se ha puesto una pelota. Y ahí quedaba Juan, un poco colgado, porque también habría querido poner en su pieza un balón pero le ha dejado la prerrogativa al peque, y al final ha optado por otra cosa que tampoco le disgusta demasiado: una jarra de cerveza.

Total, que en el tatu están recogidas sus aficiones y sus idiosincrasias, pero al mismo tiempo creo que  recoge muy bien lo que es la vida en sí misma: la parte intelectual, la física y la lúdica. Como no tengo más hijos aquí se acaban las partes de la vida, se siente. Si hubiera tenido un cuarto retoño igual habría habido cabida para la parte espiritual, que reconozco que en nuestro "Brothersitos" queda poco representada.

Como ya he comentado otras veces, aunque no soy demasiado forofa de los tatus con fines meramente estéticos, en cambio soy una gran entusiasta de grabar en el cuerpo las cosas realmente importantes y significativas. He escrito varios posts sobre los tatus en homenaje a nuestra querida Helena, y sobre lo que significan para mi hija y para mí. 

Para mí "Brothersitos" es la representación visual de un sueño familiar. Podría decir una guarrada vomitiva del tipo "es la imagen de mis hijos unidos en el puzzle de la vida" (vale, ya lo he dicho, perdón por la paralipsis), pero lo que realmente significa es que han sido capaces de ponerse de acuerdo en algo, y que si lo han conseguido esta vez sólo tendrán que mirar ese tatu en lo sucesivo para volver a hacerlo.

Cómo lo diría? Del mismo modo que un día expliqué que nuestros tatus de Helena nos obligan a hablar de ella cuando la gente nos pregunta por su significado, y que de ese modo la devolvemos a la vida por unos instantes,  "Brothersitos" obligará a mis hijos a hablar los unos de los otros cuando tengan que explicar el significado de esa imagen. Y si en algún momento de la vida tienen sus más y sus menos, cosa que ocurre con frecuencia en todo tipo de familias, bastará con que se miren el brazo para recordar ese lazo. Y para hablarles a sus hijos y a sus nietos de sus hermanos. Bueno, si es que algún día tienen hijos, cosa que a estas alturas empiezo a considerar muy improbable, puesto que ninguno de ellos se muestra proclive a la reproducción, ni siquiera como plan futurible.

En fin, no voy a negar que también me gustaría que me recordaran a mí como la financiadora de la obra en cuestión. Que algún día, cuando yo no esté, se junten y digan: "qué hijaputa la tía, cómo se lo montó para que no nos olvidemos de ella".

No, de verdad, he hecho muchos regalos en mi vida, pero creo que éste es el que más me ha gustado hacer. Por su significado y porque, aunque me ha costado bastante menos que un diamante, también es para siempre.  

Mis pequeños brothersitos, a los que adoro y a veces no niego que querría haber matado, llevan aparte de su ADN común, la señal visible de que forman parte de mí. 

Ea, otro día que termino con el moco colgando! Cuando no es por la Bimba es por estos óvulos canallas que se me fueron de las manos. 

Ps. Por cierto, el tatu es obra de un artista local poco conocido pero que merece reconocimiento público. Su nombre de guerra es "La Clandestina". Por motivos obvios esto debe quedar entre nosotros. Pero no está de más hacerle un poquito de publicidad al chaval a pequeña escala. El boca a boca, que se dice.

Ps2. Quien quiera contactar con él que me pregunte privadamente. Buen precio y calidad garantizada.

Pobrecillo Urdangarín, qué pedazo polvorín!

Hay que ver la que ha liado el pobre Urdangarín por unos simples cuernos! 

Y hay que ver también la sociedad tan cutre y tan hipócrita que tenemos! Pos no parece que lo peor que se puede hacer en el mundo es ponerle los cuernos a tu pareja! Una cosa que pasa con toda naturalidad en las mejores y en las peores familias. Vamos, yo juraría que como mucho como mucho puede haber un 10% de matrimonios en los que nunca se haya dado una infidelidad, si no consumada en su totalidad, desde luego sí en la intención y en la mente. Vamos, contando lo de la mente ya es que no llega ni a un 2%. 

Ya he hablado del tema de la infidelidad otras veces en el blog. Y los que me conocéis sabéis que no creo en la fidelidad en absoluto y que la monogamia de larga duración me parece una aberración antinatura total. Por otro lado las relaciones clandestinas tienen un encanto que de ninguna manera tienen las oficiales, y en muchas ocasiones ayudan incluso a reforzar los matrimonios, porque dan mucha vidilla y te hacen salir de la monotonía y de la rutina de pareja, que puede ser bastante letal.

En fin, no entiendo para nada la que le están liando al pobre Urdangarín por este asunto. Personalmente me parecen bastante más graves que los líos de faldas de este señor sus turbios asuntos financieros y la sospecha de que buena parte de la pasta que en su día ganó de modo ilegal puede seguir conservándola en alguno de esos paraísos fiscales a los que tan aficionados son algunos miembros de su familia política, y no quiero señalar a nadie. Y también me da bastante penilla su mujer, que con la que se ha montado va a tener muy difícil seguir manteniendo un matrimonio que se ve que a ella le compensa. Es probable que Urdangarín sea un buen marido, fueraparte la ligereza de su bragueta, ya conocida desde los tiempos del caso Noos.

Si esa señora sabe que él tiene cierta debilidad por las mujeres pero ambos piensan que su familia está por delante de todo, si eres un ente anónimo es posible que puedas mantener las cosas como estaban, pero si todo el mundo está enterado, y en este caso no hay lugar a dudas de que se ha empapado de la historia hasta el último cochino de la porquera, la cosa se complica. Con qué cara sale a la calle de paseo con él de la manita, cuando toda la gente espera un inminente comunicado sobre el cese de la convivencia (por dioooooooos, qué insoportablemente cúrsiles son para decir las cosas los Borbones de los cojones!!) En fin, yo de ella pasaría como de la mierda de la gente y seguiría tan tranquila con mi vida, le parezca lo que le parezca al mundo mundial.  Para estas cosas yo voy a tope con Aute cuando decía aquello de "Una de dos, o me llevo a esa mujer o entre los tres nos organizamos, si puede ser".

Pero bueno, probablemente no lo hará. O sí, yo qué sé, la verdad es que me importa una mierda. Su caso simplemente me da la coartada perfecta para despotricar sobre la hipocresía de la sociedad.

Quien no tenga unos cuernos en su familia que levante la mano. Si no concretamente en su pareja (aunque dale tiempo) en sus padres, sus hermanos, sus amigos, sus hijos... Por favor, que la jodienda no tiene enmienda! Y además, en mi opinión, muchos de los que no lo han llevado a la práctica nunca es o porque el objeto de deseo no ha querido o porque no han llegado a dar el paso de decírselo. Pero vamos, que no hay nadie que no haya deseado alguna vez follarse a otro u otra que no sea su cónyuge. Eso no existe, y a todo el que se le ha presentado la oportunidad lo ha hecho y punto. No sé a qué viene echarse tanto las manos a la cabeza y darse tantos golpes de pecho. Qué cutrerismo, por favor! Y los primeros los medios, como si la inmensa mayoría de los presentadores y colaboradores no hubieran pasado por lo mismo.

Como sabéis, yo soy muy fan de la infidelidad. He tenido muchas discusiones por aquí y por el estercolero de Twitter por defenderla a muerte. En cambio me dan muchísimo por culo las petardas y petardos que se empeñan en dejar de ser la otra u otro para convertirse en parejas oficiales. La gente que se encoña o empolla y está decidida a cargarse el matrimonio del novio o novia. No puedo con ellos. Por eso no puedo ni ver a Marta Riesco, la nueva novia de Antonio David Flores, que no ha parado la tía hasta que no ha conseguido sacar a la luz su historia clandestina y convertirse en la novia formal.  Ya son ganas de ir por la vida destrozando familias tontamente. En fin, ya se arrepentirá cuando se dé cuenta de que la clandestinidad era mucho más chula que el aburridísimo día a día. Cuando Antonio David se tire los cuatro primeros peos en la cama y deje de mandarle guasaps guarros a todas horas echará de menos ser la otra fijo. Yo lo he confesado muchas veces sin pudor ninguno, que siempre me ha gustado mucho más ser la otra que la legítima. Y que si en algún momento alguno de mis novios clandestinos ha hablado de dar un paso hacia la oficialidad se me han puesto los pelos como escarpias.  

Bueno, en definitiva, que me da penilla Urdangarín, por muy chorizo que sea. Y la infanta también, por mucho que se librara en su día de ir a la cárcel por mor de la ingeniería legal que montaron para conseguirlo. Me dan pena porque se ve que son personas que le tienen aprecio a su vida familiar, que han aguantado carretas y carretones, el juicio, la cárcel, la presión mediática, el repudio familiar de los Borbones... Y ahora por unos tristes cuernecillos de nada, al final van a tener que sucumbir. Porca miseria!

Desde aquí los animo a pasar olímpicamente de la peña y a ponerse el mundo por montera. Nunca mejor dicho, por aquello de los cuernos. Jejejejejeje, no he podido resistirme a hacer un chistecillo. 

Cristina, tía, pasa de la peña y tira palante con dos ovarios! Y si dicen que dizan. Desde cuándo te ha importado a ti ni medio pimiento? Y tú, Urdangarín, tío, ten una mijilla de más cuidao, que hoy en día hasta el más tonto tiene un móvil y sabe hacer fotos, coññññño!

Pobrecillo, si es que es mu pringao! Al final ha sido el único de toda la panda mafiosos que ha pisado el trullo y encima ahora van y le joden el matrimonio.

No tengo remedio, soy una romántica empedernida.

martes, 11 de enero de 2022

Pensemos por un momento: vacuna o medicamento?

He sabido estos días que en los CDC (Centros para el Control y Prevención de Enfermedades) de Estados Unidos han cambiado recientemente la definición de vacuna, sustituyendo el concepto de inmunidad por el de refuerzo del sistema inmunitario, con el fin de poder incluir a las vacunas contra el Covid 19 en esta definición.

Y yo me pregunto hasta qué punto tiene sentido este tipo de cambios. Es un cambio con un sentido científico o político? Porque dependiendo de que sea una cosa o la otra sería o no justificable.

Hasta ahora entendíamos por vacunas unos compuestos farmacológicos que nos inoculaban con  un virus debilitado que producía una enfermedad determinada con el fin de inmunizarnos contra ella. Las vacunas podían tener más o menos efectividad pero ése era básicamente el funcionamiento.

A estas alturas ya todos sabemos que las vacunas con las que ahora contamos para el Covid-19 no inmunizan. Únicamente evitan la gravedad de la enfermedad si te contagias del virus. Que no es poco, eh? Es importantísimo. Yo soy una gran defensora de estas vacunas, de hecho acabo de ponerme la dosis de refuerzo, y además me congratulo de que la ciencia haya sido capaz en tan poco tiempo de dotarnos de este mecanismo de protección que, estoy segura, ha evitado muchísimas muertes y muchísimas enfermedades graves.

Dicho esto, no entiendo por qué han tenido que cambiar la definición de vacuna, en lugar de llamarlas como se ha llamado de toda la vida a estos compuestos, o sea, medicamentos. Preventivos, pero medicamentos. Creo que el problema de haberlos considerado "vacunas" es que mucha gente ha confundido el concepto. Y por un lado los "antivacunas" se ufanan de la cantidad de contagios que sigue habiendo a pesar de la masiva vacunación, y por el otro muchos "provacunas", que en nuestro país somos inmensa mayoría, a menudo se sienten decepcionados al saber que personas con la pauta completa del medicamento siguen contagiándose y algunas hasta lo pasan regular, aunque no terminen en una UCI. Si dejáramos de llamarlos vacunas a lo mejor los conceptos quedaban más claros para todos.

Hace unos días vi en la Sexta Noche una entrevista que se hizo viral en las redes. El entrevistado era Ángel Martín, el humorista y presentador que acaba de publicar un libro contando su experiencia con una enfermedad mental. Como de costumbre,  hicieron lo de siempre, le preguntaron por toda la actualidad. Luego la gente se queja de que los famosos opinen de todo. Pero coño, qué quieres, si son los periodistas estos de pacotilla que sufrimos los que les preguntan por virus, volcanes, cambios climáticos o fenómenos paranormales?

En fin, el planchazo del presentador fue apoteósico. Le salió el tiro por la culata totalmente. La pregunta iba teledirigida pero Ángel, en mi opinión muy inteligentemente, no se dejó avasallar ni conducir y opinó libremente. Tal vez tenga que ver con que viene de un lugar muy oscuro y ya le importa una mierda lo que la gente pueda pensar de él. 

Para los que no lo hayáis visto ni oído os reproduciré poco más o menos la pregunta y la respuesta:

- Y qué opinas de que haya negacionistas que insolidariamente no quieran ponerse la vacuna poniendo en peligro a toda la sociedad con su actitud? (Nótese la total imparcialidad periodística del sujeto - modo ironía on) 

- Pues mira, lo que creo que es un verdadero peligro es este intento de enfrentarnos los unos a los otros. Esta vacuna no inmuniza, no evita los contagios, sólo evita la gravedad de la enfermedad. Así que si yo me la pongo me estoy protegiendo a mí mismo y no tengo por qué convertir en mi enemigo al que no se la ponga. Y al revés igual. Si no te la pones te perjudicas a ti mismo. Esta polémica es totalmente artificial, sobre todo en este país, en el que de forma voluntaria más de un 90% de la población se ha vacunado. Y los medios también juegan un papel importante en este estado de enfrentamiento. Porque si muere de Covid alguien que no estaba vacunado es un bombardeo diario y permanente, pero si muere alguien que sí lo estaba, o se obvia la cuestión o se le quita importancia. Y esto es hacer trampa. O jugamos todos a lo mismo o no jugamos. A mí en esa batalla no me van a encontrar.  

La carita del presentador fue un poema. Os la podéis imaginar?

Pero los aplausos mentales míos y de muchísima otra gente ante estas palabras ahí quedan. Y no sólo mentales, puesto que Ángel, como ya he dicho, fue TT, y el apoyo fue mayoritario.  Y me alegré bastante porque en un país tan polarizado en todo como éste, en el que o eres antivacunas a muerte o eres tan forofo de las vacunas que quieres ponerte una cada semana, que haya una postura de sentido común como la suya y que sea aplaudida por tanta peña, con lo que es Twitter, con la fauna que hay ahí metida, joder, me reconcilió por un día con el mundo. Mi misantropía habitual se alivió una mijilla.

Llevo meses discutiendo con antivacunas y con forofovacunas por igual. Con los que intentan convencerme de no vacunarme porque tengo el coco comido y vete a saber lo que me están metiendo y la de catástrofes que me pueden pasar en un futuro más o menos próximo (oye, que me acabo de vacunar y lo mismo me da un pelotazo hoy o dentro de unos días y la palmo, pero ésa ha sido mi opción y he valorado la relación riesgo-beneficio y me ha compensado, aunque me pueda salir rana, como todo en la vida)... bueno, pues eso, discuto con éstos, pero también me doy de hostias con los que quieren obligar a todo el mundo a vacunarse sí o sí, amenazándoles con repudiarlos socialmente y mandarlos a guettos en los que no puedan relacionarse con nadie hasta que entren en razón y se pinchen, aunque esto sea una tortura para ellos porque estén convencidos de que se están metiendo una bomba de relojería que les hará explotar en días o semanas. 

A mí, como a Ángel, tanto miedo me dan unos como los otros.  Y los que intentan confrontarnos constantemente para que al pelearnos entre nosotros no los miremos a ellos. Ya, ya sé. No hace falta que me lo digáis: soy equidistante.  El palabro supuestamente "ofensivo" que debería hacer que me sintiera insultada. En fin, yo también, como Ángel, he pasado por unos cuantos infiernos, e igualmente me suda lo que nadie pueda pensar de mí. Y si lo peor de lo peor es que te llamen equidistante, pues de puta madre.

Tampoco termino de entender en este país el sentido del pasaporte Covid. Recuerdo cuando el año pasado lo propuso Díaz Ayuso en los aeropuertos y en las fronteras para no tener que cerrar la hostelería en Madrid y la pusieron a parir por "señalar" a la gente como en tiempos del nazismo.  Los mismos que la llamaban nazi y loca ahora son superforofos del pasaporte y lo han adoptado entusiasmadísimos, como han hecho en toda Europa. Y fíjate, puede que entonces, cuando ella lo propuso, no fuera tan mala idea, porque había muy poca gente vacunada y al menos pretendía que los que lo estuvieran o hubieran pasado la enfermedad y estuvieran inmunizados, pudieran entrar y darle un poco de vidilla a la hostelería y al turismo. Y por aquel entonces aún creíamos que las vacunas eran verdaderas vacunas y evitaban los contagios. Pero ahora... ahora que ya estamos la inmensa mayoría vacunados y además sabemos que no estamos inmunizados y que podemos contagiarnos y contagiar, de qué coño sirve el puto pasaporte? Para que la gente tenga una falsa sensación de seguridad y se meta a mogollón en sitios cerrados a infectarse unos a otros como si no hubiera un mañana?

En fin, a estas alturas la decepción con la clase política en general y con los medios es inmensa. Hace mucho tiempo que decidí no volver a votar a ninguno de estos majaderos que creen representarnos. A mí no me representa ninguno. No soporto sus medidas de postureo, ni de unos ni de otros (lo de volver a las mascarillas en exteriores me terminó de rematar, cuando ya todos sabemos cómo funciona este virus) ni me creo ni media palabra de unos medios que claramente siguen el discurso oficial..., y ay del que se salga medio milímetro!

Yo por suerte tengo mi blog para poderme expresar libremente. Y mi postura es ésta:

Creo en el bien que estos medicamentos, que erróneamente llamamos vacunas, están haciendo. Me alegro de que en tan poco tiempo la ciencia nos los haya puesto a disposición. Me he vacunado libremente asumiendo los posibles riesgos y animo a la gente a hacerlo. Pero respeto totalmente a quien decida no hacerlo, por el motivo que sea. Jamás intentaré convencer a nadie de que haga lo que he hecho yo ni mucho menos intentaré criminalizarlo ni aislarlo de la sociedad. Lo haría si su actitud me pusiera en riesgo a mí, como lo haría con un conductor borracho que pone en peligro la vida de los demás. Pero no con esta gente que sólo se perjudica a sí misma. 

Y me alegro enormemente de que haya gente como Ángel Martín, capaz de no dejarse teledirigir por preguntas capciosas tendentes a reforzar el discurso oficial.  Me apunto totalmente a respetar las decisiones de la gente, a exigir que se respeten las mías y a que me llamen equidistante todos los gilipollas que se creen con derecho a imponer a los demás sus ideas y sus opciones vitales.

Como diría mi admirado Fernando Fernán -Gómez: "Váyanse a la mierdaaaaaaaa!"

jueves, 6 de enero de 2022

Coprofilia o prerrofilia, todo queda en la familia

Esto que conste que es a petición popular. 

A medio camino entre la coprofilia y la perrofilia, he sido requerida para seguir comentando cosillas sobre los hábitos cagatorios perrunos. 

Parece que el tema despierta grandes pasiones y, aunque no soy una gran experta, creo que podría ser interesante establecer una comparativa entre los dos perrillos a los que he amado y cuyas costumbres cagatorias he estudiado profundamente. 

Así que... allá voy!!

Mi Manolo, ay mi Manolillo, daba siempre cuatro vueltas sobre sí mismo antes de cagar. En ese sentido la Bimba es bastante más austera, sólo necesita dos. 

Hay que tener en cuenta que el Manolo era mucho más pequeño, prácticamente la mitad. Pesaba menos de 4 kilos, mientras que la Bimba pesa casi 8. Al lado de él es una giganta. Es probable que los perros den vueltas según su peso y tamaño.  Aunque claro, si esto fuera así, los minis que no llegan a los 2 kilos tendrían que dar como 20 vueltas. Y los perros grandes no necesitarían dar ninguna. Ufffffff, complicado! En fin, si alguien quiere aportar alguna información al respecto me encantaría ampliar mi espectro informativo.

Continuemos. 

El Manolo, después de dar sus 4 vueltas, levantaba las patitas de delante y defecaba apoyado en sus cuartos traseros. Era muy gracioso, a mí se me caía la baba mirándolo. Nunca en la vida he visto a nadie cagar con tanta gracia, la verdad.

La Bimba tampoco le iguala en este aspecto. Es una perra mucho más seria en todo. Ella da sus dos vueltas y lo que hace es que caga andando. Vamos, que caga y anda a la vez. Es una cosa muy rara. Porque además dificulta muchísimo la labor de recoger sus excrementos. Con el Manolo era fácil porque eran muy chiquitos pero estaban juntos. Con ella es casi imposible adivinar cuántos han sido y dónde están. 

Normalmente el número de truños oscila entre 2 y 4. Nunca menos y raramente más. Pero claro, nunca sabes exactamente cuántos han sido. A poco que te despistes se te puede pasar alguno.

Por las noches es especialmente difícil discernir el número. Porque la noche confunde, eso es así, ya lo dijo Dinio en su día. Y porque no se ve medio carajo.  Y tampoco puedes pegar la cara al culo de tu perro para comprobar con exactitud la cantidad de materia fecal que expulsa. 

Ahí es donde juega un importante papel tu intuición, avalada por el conocimiento de tu perro. Yo, por ejemplo, sé que la Bimba por las mañanas caga casi siempre 4 mojones y por las noches suele quedarse en 2. Que alguna vez se me ha podido quedar alguno en el tintero? Pues probablemente. Pero quiero dejar constancia de que siempre los he buscado con el máximo empeño. Lo que no puedo es garantizar que no se me hayan podido camuflar con el medio ambiente. Tampoco el color ayuda mucho, la verdad. En la naturaleza hay mucho marrón, y yo tampoco soy un lince. 

En fin, no recuerdo que el Manolo hiciera nada especial después de soltar sus truños. Era un tipo bastante pasota, creo que una vez que evacuaba le daba todo un poco igual. 

La Bimba siempre pega un saltito hacia adelante. Ella es muy particular para sus cosas. Sospecho que lo que no quiere es pisar su propia mierda. Por así decirlo, se aleja del lugar del crimen. Yo entonces, en mi ánimo de cuidar lo máximo posible el medio ambiente, tiro de la correa, la acerco y le limpio el culillo con un pañuelo de papel. El mismo que uso para recoger sus zurullos. 1, 2, 3 y 4. Los voy contando. Y si ha tenido el detallazo de cagar al lado de un contenedor de orgánica la jaleo y le doy besitos.

La verdad es que tengo muy mala memoria, como ya os he contado otras veces. Sólo recuerdo que me gustaba muchísimo mirar al Manolo cagar, y que incluso escribí algún post sobre eso. Era tan gracioso! Era como Chiquito de la Calzada, pero en perro. 

En fin, mi presente es la Bimba. Una perra asocial, antipática, chillona, asustadiza, obesa, petarda... en definitiva,  lo peor. Tengo que reconocer que en mi familia no despierta pasiones, al menos positivas. La frase más utilizada para referirse a ella es: "Coñazo de perra, hosssstiaaaaa!"

Cuando le dicen esas cosas, aunque yo reconozco que llevan razón, a mí me entra mucha ternura y mi instinto maternal se dispara. Siento que soy la única que la quiere en el mundo y que, aunque no la entienda muy bien porque es una puta loca, tengo que cuidarla y protegerla, porque... si no lo hago yo quién lo va a hacer, con lo esaboría que es? 

Joder, al final cuando hablo de mis perrillos casi siempre termino en plan moñas. Y con el klinex chorreando.

Pero bueno, esto iba de cómo cagan los perros, no? 

Joder, cómo me enrollo! 

Lavirgen, parezco la abuela Cebolletas.


miércoles, 5 de enero de 2022

Guerra de micromachismos versus microfeminismos

Hoy me gustaría hacer un pequeño experimento, por supuesto sin ninguna validez estadística ni científica porque ni soy socióloga ni es mi intención poner en común los resultados. Sólo es una encuesta entre nosotros, mis queridos lectores, y yo. Y luego que cada cual se forme su propia opinión.

Voy a escribir unos cuantos pares de frases, que yo diría que son relativamente frecuentes en el lenguaje coloquial, y me gustaría que valoráseis de 1 a 10 el grado de rechazo emocional que os producen unas y otras. Vamos allá:

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1. Las tías son unas guarras.

2. Los tíos son unos cerdos.

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1. Vaya mierda, la tía no sabía ni chuparla! Al final me la tuve que cascar!

2. Vaya mierda, el tío no sabía ni comer un coño! Tíaaaa, te juro que me dormí!

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1. Pa mí la güenorra de las tetas, pa ti la rubia y la gordita pal Gordinflis, jajajajajaja!

2. Nos repartimos a los cachas y el gordito pa tu prima la de Burgos, jajajajajaja!

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1. Quedamos solos, pasamos de las tías, que son un coñazo.

2. Quedamos solas, pasamos de los tíos, que son un coñazo.

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1. Todas son iguales. Te la pegan cuando menos te lo esperas.

2. Todos son iguales. Cuando menos te lo esperas te la pegan.

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1. Tías! Qué se puede esperar de ellas?

2. Tíos! Qué se puede esperar de ellos?

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1. Jo, tío! Tenía unas tetas que eran dos pimientos! El Carapapa tiene el doble! Jajajajajajajaja!

2. Jo, tía! La polla ni se le veía! Micropene totaaaaaaal! Pa eso me lo monto con un clítoris! Jajajajajajaja!

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1. No me gusta nada el rollito que te has traído toda la noche con el Paquito.

2. No me gusta nada el rollito que te has traído toda la noche con la Pili.

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Bueno, podéis valorar de 1 a 10, como os he dicho al principio. Por si hay alguna duda, las frases numeradas con el 1 son pronunciadas por hombres y se refieren a mujeres y las frases numeradas con un 2 son pronunciadas por mujeres respecto a hombres. De momento he obviado las variantes LGTB y los géneros fluidos para no complicar demasiado la cosa.

Yo tengo una teoría, que no sé si se confirmará en vuestras respuestas. Si habéis sentido el mismo rechazo hacia unas y hacia otras sería signo de que ésta es una sociedad realmente igualitaria en la que se ha avanzado mucho en el tema de la igualdad. Pero si, como sospecho, habéis sentido un mayor rechazo hacia las frases numeradas con el 1 e incluso cierta simpatía hacia las del 2 se confirmaría mi teoría de que esta sociedad dista mucho de ser igualitaria. Sería una sociedad profundamente sexista, y no precisamente en sentido machista heteropatriarcal.

Si alguien ha sentido mayor rechazo por las frases del 2... me explota la cabeza. Booooooooom!!

No, en serio. Una reflexión: seguro que todos entendemos lo mismo cuando hablamos de "igualdad"? No estaremos sustituyendo el añejo machismo por un chorrafeminismo fatalmente entendido? En fin, ahí lo dejo para quien quiera comerse un rato la cabeza en pro de la humanidad.

domingo, 2 de enero de 2022

Haz el favor, no te rías de esos difíciles días

Algunos de vosotros, los que tenéis perrillos, probablemente sabréis de lo que os voy a hablar.

Tú sales con tu perrillo (en mi caso perrilla) con la sana intención de darle un paseíto para que su tránsito intestinal se active. Vas muy pendiente, observando cualquier signo ya conocido de que la cosa se ha puesto a funcionar. Lo has paseado por sus sitios favoritos para la práctica evacuatoria, has estado bien atenta a sus gestos, y de repente ves... que ya... se pone en posición, arquea un poquito el lomo, da una vuelta, da otra vuelta, y... y nada,  se lo piensa mejor y sigue andando. 

Falsa alarma. 

Pues bien, date por jodido, jodida, jodide, jodidi. Ya puedes estar seguro de que hoy es uno de "esos días difíciles".

Cuando un perro da dos vueltas sobre sí mismo y se para y sigue andando, es que ese día te lo vas a tener que currar, amigo. Es muy probable que antes de que se mueva el intestino del animal el tuyo mismo haya dado ya cuatro vueltas de campana. 

En fin, cuando esto ocurre ya sabes lo que te espera. Te espera un gran paseo, un paseo interminable, te espera una exploración a fondo de tu barrio y posiblemente de barrios limítrofes. 

A veces, si te duele algo, no sé, un dedo del pie, o te aprietan los zapatos, te rindes: "muy bien, si no quieres cagar hoy ya cagarás mañana". Pero tú y yo sabemos, querido perrófilo, que las más de las veces terminaremos recorriendo toda la ciudad hasta ver con gesto arrobado cómo nuestro mejor amigo arroja el fruto de su vientre al mundo exterior.  

Hay días especialmente duros, días que ponen a prueba tu paciencia y tu amor perruno. Los días de temperaturas extremas, por ejemplo. Yo sobre todo llevo fatal el frío, cuando los dedos de las manos se te van quedando congelados y ves que no,  que no hay manera, que ni patrás ni palante. Algunos habréis llorado en uno de esos días, lo sé.

Pero lo peor de lo peor es cuando llueve y tienes que llevar el paraguas en una mano y la correa en la otra. Si además estás resfriado o tienes alergia, como es mi caso, y notas que se te va cayendo la velilla y tienes que sonarte la nariz sí o sí, y no te quedan manos, no puedes soltar el paraguas, tampoco la correa... y esa liquidez que vas sintiendo por dentro de tu nariz, que amenaza con salir, y juntarse con la lagrimilla que empieza a caer... Y entonces buscas desesperadamente un refugio, un techado, un árbol, un toldo, lo que sea, sueltas el paraguas y ya in extremis consigues llevarte el klinex a la nariz y evitar en el último momento la catástrofe.

Esto cuando lo consigues, que no es siempre. A veces, cuando llegas, llegas tarde.

Y ya no quiero ni contar si encima llevas la mascarilla puesta. Esto lo dejamos para otro día, si eso.

Y luego está lo otro. Cuando por fin el perro se decide y caga. Y el lugar elegido es el más oscuro de toda la calle, no se ve ni medio pijo, y para buscar el truño o los truños entre la maleza tienes que ir a tientas. Ponerte a cuatro patas e intentar discernir qué cosa es la mierda de tu perro. Porque tienes conciencia cívica y no quieres dejar ahí, para que cualquiera pueda pisarlo y cagarse a su vez en toda tu nación, el excremento canino. Posiblemente haya una farola dos pasos más adelante, pero tu perro (perra en mi caso) prefiere hacer sus cosas en la intimidad. Es tímido, no le gustan los focos ni la fama. 

En fin, contrariamente a lo que muchos piensan, tener un perrete no es ningún chollo. Puede que en tiempos de pandemia y confinamientos sea una pequeña ventaja porque se te permite salir de paseo. Pero recordemos que la mayor parte del tiempo de nuestras vidas no estaremos confinados (al menos es lo que todos esperamos), y que, salvo que seas un hijoputa de esos que abandona a su mascota, estamos hablando de relaciones de larga duración. Hasta que la muerte nos separe. 

Así que no, no es un chollo. Hay días, sobre todo esos días difíciles, en los que es una gran putada. Doy fe.

Dicho lo cual, quiero proclamar bien alto y bien claro que mi Bimba es la perrita más bonita del mundo, que mataría a cualquiera que lo discutiera, que la quiero con locura y que recorrería el mundo entero sólo para encontrar el lugar perfecto para que ella pudiera cagar tranquila y a gusto hasta el fin de los tiempos.

Por cierto, queridos todos, feliz año nuevo.

Ps. Aunque teniendo en cuenta que mis deseos raramente se cumplen en el sentido en el que los formulo, quizás en vuestro propio beneficio os debería desear un año nuevo horrible.

Ps2. Bueno, mejor no os deseo nada y ya si eso que os vaya como buenamente os vaya y que... que eso, que os vaya. Por lo menos que os vaya. O yo qué sé, que no os vaya, lo que cada cual quiera, que le vaya o que no le vaya. Mira, olvidadlo, no he dicho nada.