lunes, 23 de diciembre de 2019

Y más perspectiva de género

Ya hablé la semana pasada de un caso bastante mediático, el de los futbolistas del Arandina condenados a 38 años por agresión sexual a una menor. Sin saber del caso más que lo que había leído en la prensa hice un primer análisis de lo que me parecía la sentencia, pero estaba en mi intención informarme mejor sobre el tema para poder emitir una opinión más formada, o en su caso, desdecirme.

Pues bien, hoy, una vez leídos los cuarenta y tantos folios de la sentencia y oídos clandestinamente los famosos audios que han circulado por ahí (creo que oírlos solamente hoy por hoy no es delito, de momento), llego a las siguientes conclusiones:

1. En la sentencia se han descartado, dando por no válidas, absolutamente todas las pruebas aportadas por la defensa, incluidos los audios en los que la menor confiesa abiertamente a sus amigas que está dispuesta a inventarse cualquier cosa para joder a los chicos si a ellos se les ocurre irse de la lengua y contar lo ocurrido. Como es delito difundirlos me he limitado a decir someramente lo que en la propia sentencia se recoge. Por tanto, la prueba fundamental en la que se basa la condena es el testimonio de la menor, a pesar de haber incurrido en numerosas contradicciones. Sin embargo ese testimonio, ese solo testimonio, es suficiente para considerar culpables a los chicos de un delito de agresión sexual cada uno más dos de cooperación necesaria en las agresiones de los otros. Total, 38 años de condena por cabeza. Sin una sola prueba más. Con dos cojones!!

2. El Tribunal da veracidad absoluta a los hechos narrados por la menor a sus padres y en cambio no da ninguna a los hechos contados previamente a sus amigas de forma muy diferente.  Estos últimos los atribuye a la inmadurez de la muchacha. A sus amigas les había contado que había mantenido relaciones voluntariamente con los cuatro chicos jactándose de ello mientras que, cuando sus padres se enteran de los hechos,  les cuenta que ha sido víctima de una violación. El Tribunal considera que esta última versión es la verdadera puesto que la confianza de la menor con los padres es mayor que la que tiene con sus amigas.

Esta parte me ha dejado verdaderamente loca, porque es la primera adolescente de la que tengo noticia que le cuenta la verdad de sus relaciones con los chicos a sus padres y que a quien cuenta trolas es a sus amigas. Mis conocimientos sobre la adolescencia han sufrido un vuelco de 180 grados, dado que cuando yo pasé esa etapa las cosas eran exactamente al revés. La información que los padres tenían de nuestras aventuras sexuales era prácticamente nula en relación a la que tenían nuestras compañeras de farra.

En definitiva, que el Tribunal, por el sencillo sistema de descartar todas las pruebas exculpatorias  presentadas por la defensa y de admitir sin lugar a dudas la declaración de la menor,  ha conseguido dictar una preciosa sentencia con perspectiva de género ideal de la muerte que a las forofas del Hermanayosítecreo les ha entusiasmado.

Conste que yo también creo a la muchacha, eh? Pero claro, no precisamente en la versión "paterna". Ha contado las suficientes variantes de los hechos como para que por cojones alguna tenga que ser la verdadera.

Os acordáis de "Doce hombres sin piedad", aquella pedazo de película que en su día fue referente de la progresía mundial? También en España se hizo una adaptación teatral magnífica para el espacio televisivo "Estudio 1". José Bódalo, José María Rodero, Luis Prendes, Ismael Merlo.... La recordáis? Qué maravilla!!

En la versión cinematográfica el protagonista era Henry Fonda, impecable en su papel de miembro del jurado que conseguía durante dos horas de deliberación convencer uno por uno a los restantes miembros de que no podían condenar a un muchacho acusado de asesinato, basándose en el principio de la duda razonable. Poco a poco iba desmontando las certezas de cada compañero hasta que conseguía rendir hasta a los más recalcitrantes. Fue una obra muy impactante en su momento.

Pues bien, hoy en día la duda razonable sencillamente no existe, no puede existir... siempre que la presunta víctima sea de sexo femenino.  El "Hermana, yo sí te creo"  es el nuevo lema impuesto por la obligada perspectiva de género. Da igual que la persona sea una mentirosa redomada, o una desquiciada, da lo mismo que su testimonio sea más o menos fiable. Siempre tiene que ser creída aunque haya pruebas más que contundentes en contra de su testimonio. Cualquier duda razonable será tachada de machismo heteropatriarcal y rechazada de inmediato con espanto. 40 años de reclusión? Y los que haga falta. Si una tía dice que has hecho algo es que lo has hecho y punto. Date por muerto.

Hoy Henry Fonda, si hubiera planteado alguna duda razonable en este caso, habría sido tachado sin el menor rubor de defensor de violadores y pederastas.  Como he sido tachada yo misma y amenazada con denuncias varias y años de presidio por múltiples usuarios de las redes sociales. Yo y cualquiera que se atreva a discutir esta o cualquier otra sentencia con "perspectiva de género".

- Estás denunciada por defender a pederastas.

- Búscate un abogado.

Lo juro. Hay miles de personas en las redes, guardianes de las esencias morales,  a la caza y captura del disidente para delatarlo a la autoridad pertinente.  Una especie de policía de las buenas costumbres que recuerda a tiempos pretéritos que yo creía superados. El mero hecho de hablar se convierte en deporte de riesgo. Sin ir más lejos, ahora mismo al escribir esto me la estoy jugando.

Mis hijos se cabrean conmigo.

- Pero mamá, por qué te metes en estos berenjenales?

- Pues por dos cosas. Primero porque cualquier día podéis ser vosotros los que seáis denunciados falsamente por una tía y por más que gritéis vuestra inocencia nadie os creerá. Y segundo, porque todavía creo en la libertad.

viernes, 13 de diciembre de 2019

Más perspectiva de género

A raiz de mi último post mantengo esta conversación por guasap con una amiga, que espero que no se moleste por transcribir nuestra charla privada, que me parece muy interesante e ilustrativa.

Como es anónima sólo ella sabe quién es:

Anónima: Yo opino que por mucho que quiera la tía si es menor ni mirarla, pero claro, eso es imposible pa los tíos.

Yo: Eso es una gilipollez. Yo cuando tenía 14 años me follé a medio Muriano. Era un zorrón total, y además encantada de serlo.

Anónima: PUTAAAAAAAA!!!!!!!

Yo: Totalmente.

Anónima: Jajajajajajaja (Con emojis)

Yo: Hoy encerrarían a 40 años a todos esos tipos. Pobrecillos!

Anónima: Por eso comprendes tan bien.

Yo: La que nace lechona muere cochina. Y yo sigo siendo un zorrón.

Anónima: Hay tantas diferencias que es complicado.

Yo: No puedo con tanto puritanismo. Hace 30 años yo hacía cosas que hoy son delito y pecado mortal.

Anónima: Pero tú no decías na, lo hacías y punto.

Yo: Qué coño! Se lo contaba a todas mis amigas, que eran igual de zorras que yo. Qué tiempos aquéllos!!!!

Anónima: Ya pero ni se te pasaba por la cabeza la palabra violación, ahora es distinto todo.

(Hasta aquí la charla, Ahora sigo por mi cuenta.)

Y tan distinto, amiga anónima, y tan distinto!

Recuerdo que por aquella época había una canción de Las Vulpes cantidad de transgresora. Se llamaba "Me gusta ser una zorra". Pues bien, yo, que era una rebelde sin causa y una provocadora sin remisión que pretendía matar a mis padres a sofocones, cantaba a voz en grito aquello siempre que podía:

ME GUSTA SER UNA ZORRAAAAAAA
ME GUSTA SER UNA ZORRAAAAAAA

Mis padres los pobres no ganaban para disgustos.  La verdad es que tenían el cielo ganado conmigo. Me miraban con horror porque ellos eran muy católicos y les había salido la hija aquella que cantaba esas cosas, y no sabían si hostiarme, matarme o qué.

Hoy en día directamente todas las puritanas guardianas de las esencias feministas directamente me lapidarían en plaza pública. Y a las Vulpes ni te cuento. Probablemente las denunciarían en algún juzgado de violencia de género y terminarían con Valtonyc y con Puigdemont en algún sitio por ahí.

Qué coño! No podrían terminar en ninguna parte porque el puritanismo de género es global. Todavía Valtonyc y Puigdemont tienen sitios donde refugiarse pero Las Vulpes y la Inma adolescente de los 80 dónde coño iban a ser acogidas? En unos sitios por la polla el género y en otros por la polla el Islam, a ver dónde nos íbamos a meter.

De verdad, me reafirmo mil veces en lo que le decía a mi amiga anónima. Estoy hasta el coño de puritanismo, venga de la religión que venga. Me da igual el Islam que el Radfem. No puedo con los fundamentalismos de ninguna especie (iba a decir género, pero he rectificado a tiempo).

Ps. Quiero puntualizar, por si alguien me conoce de aquella época adolescente, que follar en realidad no follaba porque yo había estado en un colegio de monjas y lo de la virginidad lo llevaba muy a rajatabla. Pero vamos, excepto follar todo lo demás que se os pueda ocurrir sí que lo hacía.  Y era feliz haciéndolo. Y lo hacía con tíos mayores de edad, algunos bastante mayores. Vamos, que sí, que era un zorrón de cuidao.

Ps2. También quiero puntualizar que ahora ya no soy tan zorra. Vamos, casi nada, la verdad. Pero por favor, no se lo digáis a nadie porque me sigue encantando ir de zorra por la vida. ME GUSTA SER UNA ZORRAAAAAAAA!!!!!!

Perspectiva de género

Andan las feministas encantadas con la sentencia que ha condenado a 38 años de cárcel a los jugadores de la Arandina por la violación de una menor de 16 años. 38 años. 14 por cada violación y 24 más por colaboración necesaria en las otras dos. Dicen que es una sentencia con "perspectiva de género".

Los hechos son los siguientes: la chica acude al domicilio compartido por los futbolistas. De lo que ocurre allí hay dos versiones: la de la niña y la de ellos. Ella afirma que fue violada y ellos que no. Su palabra contra la de ellos, no hay más testigos de lo ocurrido.

El pueblo de Aranda se lanza a la calle, una parte para defender a la niña y otra para defender a los futbolistas. Se filtran mensajes de la niña a sus amigas vacilando de haberse tirado a los muchachos. Se filtran mensajes en los que afirma que de violación nada de nada, pero esas pruebas no son admitidas por el Tribunal. Parece que no son significativas de nada. Es decir, que yo pongo una denuncia por violación y voy contando lo ocurrido por el Facebook y eso no es un detalle importante para el Tribunal. Interesante, no os parece?

La sentencia condenatoria se fundamenta única y exclusivamente en la declaración de la muchacha, que a pesar de haberse contradicho en varias ocasiones, le parece harto fidedigna a los miembros del Tribunal, tan fidedigna que ninguna de las pruebas en contra le parecen dignas de crédito, tan fidedigna que ha merecido una sentencia de 40 años para los acusados.

Si la hubieran matado y se hubieran deshecho del cadáver probablemente habrían salido absueltos. Porque para condenar por asesinato a una persona hacen falta pruebas, pruebas contundentes del delito, no cuatro pruebas circunstanciales. De hecho es que a cualquier jurado se le exige que justifique con pruebas una sentencia condenatoria, y en caso contrario se le devuelve la sentencia hasta que lo haga.

Hace poco condenaron a 8 años o así a un tipo por matar de una paliza en un bar a otro que llevaba unos tirantes con la bandera de España. Homicidio. 8 años. Y el señor de la banderita ya no podrá volver a ponerse tirantes jamás porque está difunto. 8 años. Y a éstos les cae 38 por una "violación". Lo pongo entre comillas porque sinceramente tengo serias dudas de que lo que le ocurrió a esa adolescente pueda calificarse como tal, y tengo esas dudas porque jamás he conocido a nadie a quien hayan violado y se vanaglorie de ello por las redes sociales, pero bueno, que cada cual piense lo que quiera al respecto. El pensamiento es libre. Todavía.

En fin, en cualquier caso, fuera o no violación, yo no sé a qué punto hemos llegado para que se pueda condenar a más años a una persona por este delito que por el de asesinato. José Bretón fue condenado a 40 años,  20 por cada uno de sus dos niños asesinados y quemados en la finca familiar.  2 niños muertos, 40 años. Los mismos que a éstos por la "violación" de la niña que luego se lo contó entre jajas y jijis por el guasap a sus amigas.

Al final terminaré votando a Vox. Me estoy resistiendo porque son muy carcas, muy meapilas, muy brutos y me dan un montón de repelús, pero al final los terminaré votando. Estoy hasta el coño de la puta "perspectiva de género" hasta para decirte cómo tienes que cagar, si esto sigue así palabrita que los termino votando.