Hace poco vi una peli chilena titulada "Sin filtro". Divertida, nada del otro mundo pero se pasa un buen ratillo.
La historia va de una tía que está rodeada de anormales (su jefe, su marido, el hijo del marido, su exnovio... ), una panda que no veas, y la tía venga a tragar carretas y carretones y con unos ataques de ansiedad que te mueres. Hasta que un día le da uno más fuerte y decide ir a un curandero chino que la somete a un tratamiento y a partir de entonces empieza a soltar a todo el mundo "sin filtros" todo lo que piensa, por supuesto para pasmo de todos sus amigos y conocidos.
Bueno, ya digo, la peli como tal no es ninguna maravilla pero tiene su puntito y es graciosa. Sin embargo hay algo que me llamó la atención viéndola. Claro, la protagonista es esa clase de persona que nunca levanta una voz más alta que otra y que asume estoicamente el puteo constante al que es sometida por todos los que la rodean. De manera que el día que empieza a soltar verdades como puños y a rebelarse, la reacción de todo el mundo es de incredulidad: pero qué le pasa a esta tíaaaaaa?? Y muchos terminan preguntándole: "Tienes la regla?"
Y aquí viene el tema de mi post de hoy. Porque la colega mira a todos los que se lo preguntan con una indignación absoluta, como si la estuvieran insultando terriblemente. O como si fueran más simples que una lechuga por hacer una pregunta así. Y juraría que el director (Nicolás López se llama el muchacho por cierto) así pretende que lo vea el espectador, como si se tratara de un interrogante ofensivo, cruel, machista y abominable.
Y mi pregunta es: por queeeeeeé?? O sea, por qué a la gente le parece tan mal, tan machista, tan ofensivo y tan impresentable lo de preguntar a una tía que obviamente no actúa como lo suele hacer si lo que le pasa es que está con la regla. Y quien dice regla dice menopausia, por ejemplo. Que también hay quien se sube por las paredes porque se lo pregunten.
Qué pasa? Es un secreto que la actividad hormonal femenina afecta un montón a nuestro comportamiento? Todas las tías que me estén leyendo no saben que esto es así?? Y sus maridos, hermanos, padres, compañeros de piso o de trabajo no lo saben igualmente?? Dónde está exactamente la ofensa por preguntarle a alguien si está en "esos días"??
Otra cosa sería que la mala intención estuviera en el que interroga, con algún gesto tipo "Jo, las tías con las putas hormonas de los cojones"!! Pero bueno, ahí está el tonillo para sacar conclusiones. Si quien pregunta adopta un soniquete irónico y despreciativo efectivamente una puede sentirse molesta y responder consecuentemente.
Pero es que esa pregunta en muchas ocasiones puede ser una simple observación sin intencionalidad negativa alguna. De hecho en la peli lo es. Vale que todos los que rodean a la protagonista son una panda de gilipollas de cuidao (ella la primera, por callarse todo lo que piensa de ellos), pero muchos le preguntan lo de la regla del puro pasmo que tienen porque de repente le haya dado por sacar el látigo que tenía tan escondido hasta ese día.
Desde mi punto de vista es la pregunta más normal del mundo. Yo misma he pensado eso miles de veces cuando he visto a una tía con un humor de perros que habitualmente no suele tener. De hecho a las malafollás crónicas nadie le hace ese tipo de preguntas, porque la mala hostia es intrínseca a sus personas y todo el mundo lo sabe.
Siempre habrá alguna feministonta que dirá: sí, pero a los tíos nadie les achaca problemas hormonales cuando vienen de mala hosssstia.
Mentira y na más que mentira!! O sería la primera vez que alguien comenta ante un ataque de encabronamiento masculino: "ese lleva sin follar lo menos un mes"??
Lo que yo planteo hoy aquí es por qué coño hay tantas tías ofendidas siempre por comentarios supuestamente machistas que no son tales, sino que son observaciones objetivas avaladas por la mera experiencia.
Igual que es completamente cierto que los tíos cuando quieren follar y no follan se ponen insoportables. Pero es que eso es asíiiiiiiii!! Que cada sexo tiene sus particularidades, y luego dentro de ellos cada persona las suyas. Y que un comportamiento anómalo o especialmente agresivo siempre va a despertar suspicacias en los demás, que intentarán recurrir a las explicaciones más obvias.
A mí me molesta muchísimo esa tonta costumbre de tachar de machista todo lo que se dice sobre las hormonas de las tías. Yo lo reconozco sin problemas: sí, cuando estoy con la regla no hay quien me aguante. No me mires, no me hables, no me toques, no te me acerques, no se te ocurra decirme un piropo, no me jodas... Y joderme es sencillamente que yo note tu presencia de alguna manera. Solo hay una opción para relacionarse conmigo esos días: multiplícate por cero.
Por eso cómo coño me va a extrañar ni a indignar que la gente haga esa inocente pregunta? Que tu marido o tu compañero de trabajo te diga: qué te pasa, estás con la regla??
Y te voy a decir una cosa, tía. Si eso te molesta o te indigna y le montas un tremendo pollo al tipo que te lo preguntó solo hay dos opciones: o eres una gilipollas de campeonato o lo más probable es que sí, que estés con la regla.
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