Gallardón ha anunciado una reforma de la ley de salud sexual y reproductiva y de la interrupción voluntaria del embarazo para exigir el consentimiento paterno en los casos de menores de edad que quieran abortar.
La ley vigente no exige el consentimiento paterno, pero sí que los progenitores sean informados de que sus hijas van a interrumpir su embarazo, siempre que éstas no aleguen peligro de violencia intrafamiliar, amenazas, coacciones, malos tratos o una situación de desarraigo o desamparo.
http://www.elmundo.es/elmundo/2012/01/25/espana/1327486047.html?cid=CM0803
Oye, y si existe un peligro de violencia intrafamiliar real y la criatura puede ser golpeada, vapuleada y hasta asesinada por los padres si se enteran de que está embarazada, también hay que informar?
Es increíble lo preocupados que están estos señores por las 'niñas' de 16 años. Eso sí, si a la niña el padre le da una paliza de órdago al saber de la preñez, eso a ellos ni fu ni fa. Lo importante es que los padres tengan intactos sus derechos, faltaría más!
Es curioso. Se exige el consentimiento para abortar, pero no para seguir adelante con el embarazo. En eso los padres no tienen la obligación de opinar, y si la niña quiere tirar para adelante los padres tienen que joderse, aunque sean ellos los que luego vayan a cargar con los gastos del nene y a cuidarlo
Esto también es justicia. Bravo, Gallardón!
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