Con frecuencia me pasa que estoy leyendo una novela y me empiezan a caer como el culo los personajes "buenos", los que el autor descaradamente retrata llenos de cualidades positivas pero que a mí me provocan más antipatía que otra cosa. Así que me paso el rato rajando de ellos y poniéndolos a parir, igual que me pasa con las letras de algunas canciones, como ya habéis podido comprobar en otros posts.
Eso es lo que me está ocurriendo con la novela que estoy leyendo actualmente, "Lo que esconde tu nombre", de Clara Sánchez. Conste que la novela es muy entretenida y engancha un montón, por ese lado nada que objetar. Además me gusta mucho escribiendo esta señora. Mi problema es única y exclusivamente con la protagonista femenina.
Aviso de que voy a hacer un poco de espoiler, aunque el final no lo cuento porque ni yo misma lo sé, puesto que voy por la mitad aproximadamente.
En fin, es la historia de una tía que conoce en una zona de la costa a un matrimonio de ancianos noruegos y se hace amiga de ellos, pero un día descubre que en realidad son dos nazis a los que persigue un cazador de nazis del que la chica también se hace amiga. Es la típica historia de buenos y malos, los nazis obviamente son muy malos y es normal que al lector le caigan fatal, pero se supone que el cazanazis y la muchacha están en el bando del bien, y por tanto, son los personajes con los que hay que simpatizar.
Bueno, pues yo casi que a ratos prefiero a los nazis que a la tía. Bueno, a ver, es una exageración. Los nazis son una mierda, pero es que la tía en cuanto a gilipollez está a la altura del más capullo del mundo que conozcáis. Sandra se llama la interfecta en cuestión.
La tal Sandra está embarazada y vive en una casita de verano que le ha dejado su hermana mientras piensa qué hace o qué no hace con su vida. Hasta ahí todo normal. Pero resulta que la tía tiene la absurda costumbre de salir con una motillo que también le ha dejado su hermana a pasearse por ahí, sobre todo cuando diluvia por la zona. Se ve que le encanta mojarse y pillarse pulmonías, a pesar de que por razón de su embarazo la muchacha ha dejado de fumar y de beber alcohol para no perjudicar al chiquillo. Pero eso sí, ir brincando con la moto por esos caminos de Dios mientras caen chuzos de punta eso no le parece a ella realmente perjudicial para su criatura; qué va, eso es lo más sano del mundo, hombre!
En fin, me paso buena parte del rato de lectura rajando de la tía, más o menos así:
"Eso, vete a la calle con la que está cayendo, so merluza! Menuda subnormal estás tú hecha. Tenías que caerte de la moto y pegarte un buen cipotazo, para que te pasaras el resto del embarazo tirada en la cama en reposo absoluto con la pata en alto, dejando a ese chiquillo que crezca normalmente sin una madre loca que no se puede estar quietecita ni aunque la aten. So petarda!!"
Bueno, me pillo unos berrinches que pa qué. Y cuando se entera de que sus amigos noruegos son nazis ya es todavía peor. Sus reacciones son de juzgado de guardia. Creéis que se horroriza y los mira con un poquillo de repelús? Pues no, para nada. La tía continúa viviendo con ellos como si nada y cuidando de la vieja, llevándola de un lado para otro, preparando fiestas de cumpleaños e incluso dice tan ricamente que va a ir con la noruega a hacerse la ecografía del bebé. Se ve que no encuentra ella nada peligroso juntarse con una panda de asesinos, y que eso le parece de lo más recomendable para el desarrollo fetal, no como una copa de vino o un cigarrito, que ya sabemos que son mortales de necesidad. Aaaaaaarrrrggggg, la odioooooooo!! Cenutriaaaaaaa!!
Pero ya lo peor de lo peor, lo que me ha inducido a escribir este post porque ya no aguantaba más la indignación, es cuando en el cumpleaños de la vieja la tía subnormal le regala (por recomendación del viejo cazanazis) un cachorrito de Rottweiller. El viejo, que no da puntada sin hilo, le propone ese regalo porque él sabe que era la raza de perro que tenían en los campos para asustar a los prisioneros y que la pareja esta tuvo que matar uno por uno a los 6 perros de su campo. Así que para ver qué reacción tienen le dice lo del perrito, que vaya tela también el viejo la mala leche que tiene.
Bueno, pero lo del tipo es normal. Él tiene sus obsesiones y sus razones para hacerlo, que pa eso fue víctima de los nazis, pero qué razón tiene la tía esta para regalarle un perrito a una vieja asesina? Que es un animal indefenso, joder!! Luego se ponen como se ponen los perros estos, pero en principio estás regalando un cachorrito, un ser vivo, no un ramo de flores, so hijadeputaaaaaaa. Veis? Ya he vuelto a perder el oremus. Es que me pongo a hablar de la capulla esta y termino exaltándome, no lo puedo remediar.
Qué clase de persona regala a una vieja nazi a la que apenas conoce un perrito? Ni a una vieja nazi ni a nadie, vamos. Salvo que se esté muy seguro muy seguro de que esa persona es muy amante de los animales y muy muy responsable y que va a cuidar al animal como si fuera su hijo.
Pos nada, esta mastuerza coge al animalillo, lo mete en una cesta y lo envuelve en papel de regalo y lo esconde en el maletero del coche para que la vieja no lo oiga llorar y no descubra la sorpresa. Será asquerosaaaaaaaaaa!!!!!! Meter a la pobre criatura en una caja como si fuera un centro de mesa y esconderlo a riesgo de asfixiarlo en un maletero!!!! Y éste es el personaje "buenoooooooo"???
Pero no queda ahí la cosa, no. Continúa la serie de aberraciones. La vieja, naturalmente, cuando ve al perrito lo mira con frialdad y lo aparta a un lado, de manera que la tal Sandra del cipote se da cuenta de que no le ha hecho mucha gracia el regalito. El resto de los asistentes también la miran como diciendo: "pero de dónde ha salido esta anormal?"
Y qué creéis que hace la muy mamarracha???? Pues mirar pa un lado y pal otro pa soltar el mochuelo y le da el perrito a un pollo neonazi que había en la fiesta para que se lo quede él. Un neonazi que le cae fatal, al que considera un tipo peligroso y al que describe literalmente como "de mirada resbaladiza". Y la tía le da el pobre bicho al tipo "de mirada resbaladizaaaaaaaaaaa"!!!!! Después de haber intentado colocárselo a una naziiiiiiiiiiiii que se cargó despiadadamente a seis perros en el pasadooooo!!
Y creéis que vuelve a acordarse del animalito en las páginas siguientes?? Pos no. Ni un solo momento se plantea la tía guarra qué le habrá pasado al pobre ni cómo lo tratará "El anguila", como llama al resbaladizo íntimamente.
Y ahí me he quedado de momento, pero comprenderéis que cada vez que aparece la tía o que hace algo me subo por las paredes. Ya es que si los nazis la descubren espiándolos me importa una mierda, con lo cual la novela pierde bastante interés porque si empiezas a pasar de lo que le pueda ocurrir a la protagonista, por petarda, apaga y vámonos. Qué gracia tiene una novela en esas condiciones?
En fin, que voy a a seguir leyéndolo porque me puede la curiosidad y porque el libro tiene su intriga y su tensión, sobre todo por el pobre viejecillo que fue víctima de los nazis, pero os podéis hacer una idea de los lotes de despotricar que me voy a pegar a cuenta de la personaja esta que me cae como el puto culo.
Podría haberle perdonado cualquier cosa que hiciera, de las mil gilipolleces que venía haciendo al cabo del día, pero es que lo del perrito me ha llegado al alma. Eso no se lo perdono. Asquerosaaaaaaaa!!
Hoy en las páginas que he leído la hijaputa esta se ha acordado del perrito por primera vez desde que se lo dio al Anguila.
ResponderEliminarMe gusta ser justa y decir las cosas como son. Pero sigue siendo una cabrona de cuidao.
Lo de hoy ya ha sido el remate de la pera. Ahora va la tía y se enamora del Anguila!! Se puede ser más subnormal?? Es que no puedo con ella, no puedo, es superior a mí!!
EliminarEstá metida en un lío de nazis asesinos que son verdaderas alimañas y no tiene otra cosa que hacer que enamorarse de uno de ellos porque el otro le da un besito. Pero de dónde ha salido la tía estaaaaaa??
Y ahora sí, ahora ya se acuerda del perrito. Y le dice al viejo que el perrito está muy bien y muy gordito. Lo que se había preocupao ella del animal antes de que le entrara el cuelgue con el neonazi!!
Ya lo que le faltaba, es que no hay por dónde cogerla. No puedo con ella, no puedo!!
Sigue....no nos dejes en ascuas...
EliminarPues la tía va a peor indudablemente, como era de prever.
EliminarDespués de pasarse semanas melancólica porque el Anguila ha pasao de llamarla ni de verla ni nada (que, por cierto, cuántas semanas lleva ya de embarazo esta tía, que parece el embarazo la burra?) ahora está hecha polvo porque el viejo le ha dicho que ha visto al Anguila en la playa con otra muchacha.
O sea, el Anguila es un neonazi y un probable asesino de cuidao, pero lo que a ella le preocupa de verdad es que haya estado en la playa con otra muchacha. Se puede ser más subnormal????
A ver si pare ya de una vez la petarda esta y el niño no le deja pegar ojo ni una noche y se le quitan ya todas las tonterías. Hombre ya!!