lunes, 13 de marzo de 2017

Nesting: estoy a la última moda!

Leo en la revista "Buena vida" de El País un artículo titulado "Nesting: quedarse en casa ya no es de muermos".

Por lo visto de un tiempo a esta parte quedarse en casa los findes es lo más in. El artículo dice literalmente:

"Si su plan para este fin de semana es atrincherarse entre las cuatro paredes de su morada, con una infusión, viendo series, cocinando o redecorando su habitación, ha de saber que está practicando la tendencia más cool de 2017: anidar en el hogar. Y que además, cuando llegue el lunes notará múltiples beneficios sobre su salud mental. Se trata de un antídoto para rebajar la ansiedad, aseguran los expertos."

"Hosssstia, estoy a la última!" Me digo a mí misma. Lo más in es pasar los fines de semana de relax, haciendo cositas en casa, dedicándote a tus aficiones o sencillamente holgazaneando e incluso aburriéndote placenteramente. No me lo puedo creer!

Yo siempre he pensado que la casa es el sitio mejor del mundo, lo que me sorprende es que haya gente que lo haya descubierto ahora. Algo que nunca he entendido es la manía un tanto compulsiva de mucha gente por inventar planes de fin de semana superexcitantes. A veces cuando me cuentan algunos especialmente demenciales pienso: "Pero dónde vas con el cencerro?"

Todos los viernes escucho un programa matinal en RNE y al final los tertulianos hablan de sus planes y recomendaciones para los oyentes durante el finde. Y siempre me digo lo mismo: pero esta gente es que no se queda nunca en su casa simplemente a descansar, a leer un libro, a ver pelis en la tele, a cocinar, a tumbarse en el sofá, a tomarse unas cervecitas tranquilamente tomando el sol en la terraza? Es que no son capaces de dedicar su tiempo de relax justo a eso, a relajarse y no hacer nada?

Y siempre he pensado que si yo estuviera de tertuliana en ese programa diría todos los viernes lo mismo cuando el presentador me preguntara por mis planes: quedarme en mi casa tan agustísimo dedicándome con entusiasmo a mi afición favorita, no hacer nada.

Ea, pues mira tú por dónde no sólo esto es ahora mismo lo más cool sino que encima mi salud mental está asegurada de por vida con este sencillo sistema, que encima es grato para mí y barato a más no poder.

Voy a contar aquí (creo que ya lo he hecho alguna vez, pero bueno, para quien no lo haya leído) lo que hago casi todos los fines de semana, éste por ejemplo, que ha sido sencillamente perfecto para mí:

Me levanto sobre las 9'30 para sacar de paseo a mis perrillas (antes a mi Manolo). Damos una vuelta, compro el periódico y el pan y volvemos a casa donde nos pegamos pedazo de desayuno, si hace buen tiempo en la terraza al solecito. Aproximadamente una hora desayunando y leyendo la prensa, un auténtico lujazo. Luego me tiro otra hora haciendo mi gimnasia para estar bien pollúa, y cuando termino saco otra vez a las perrillas un rato, vuelvo a casa, y ya me apalanco en la terraza a seguir leyendo la prensa, ahora con una cervecita fresca y con las nenas a mis pies. En verano me bajo un rato a la piscina. Si encarta es mi hora de llamar por teléfono a mis hijos y también guasapeo con mis amigos y con mi novio. De fondo pongo agradable musiquita relajante porque la música amansa a las fieras y en mi casa somos tres leonas de cuidado.

Cuando me entra hambre me preparo la comida y les pongo de comer a las nenas. Suele coincidir con la hora del telediario. Después pongo música otra vez y leo un rato hasta que me entra sueño y nos dormimos las tres la siesta en el sofá. Cuando me levanto vuelvo a sacar de paseo a las nenas, interactuamos con los otros dueños de perros del barrio, que no se diga que no me relaciono, y nos volvemos a casa, donde me ducho, cenamos y si hay algo interesante en la tele lo veo y si no me pongo una peli o sigo leyendo. Y cuando me entra sueño a la camita, cada mochuela a su olivo.

Algunos fines de semana salgo por la noche el viernes o el sábado, siempre un día solo porque si me acuesto tarde al día siguiente ya tengo trastocadas todas mis rutinas, me levanto tardísimo y con la tontuna propia de la resaca. Lo hago cada vez más de tarde en tarde y generalmente cuando hay algún plan que me apetece muuuuuuucho; si no prefiero el hogar dulce hogar. Si además están mis hijos en casa más todavía.

Viajar y conocer otros sitios está bien pero como cosa puntual, como un plan especial. Eso de salir corriendo de la casa en cuanto la gente junta tres días para huir a cualquier destino lo más lejano posible de su casa siempre me ha parecido un tanto enfermizo.  Una especie de horror vacui claramente patológico. Tan terrible les parece su hogar? Tanto se aburren consigo mismos? No saben estar sin hacer nada? Igual si se quedan quietos cinco minutos les da por pensar un poco y pa qué queremos más?

Yo por mi parte creo sinceramente, estoy plenamente convencida de que no hay un solo sitio en el mundo en el que pueda estar más agusto que en mi propia casa. Y ahora resulta que... ES LA ÚLTIMA MODA!!!!!

Cuche usté, vivir para ver.

4 comentarios:

  1. Muy económica que es la niña, sin duda. Lo cuentas de tal manera que dan ganas de hacer lo mismo. Recuerdo que cuando estaba sin pareja, después de mi primer matrimonio, estuve un tiempo en el que no me apetecía la calle y pasaba largas jornadas sin salir de casa, incluso en periodo vacacional. Era capaz de estar toda una semana encerrado con mi música, libros, películas y pintando. También me dio por decorar la casa y tenerla como una patena de limpia. Hoy suelo salir siempre el sábado a tomar algo y el domingo me doy un lago paseo de más de 4 horas. Pero en esencia es un placer estar en casa. Y eso sí, me encanta cocinar. Me alegro y mucho que estés tan bien Inmaculada. Un gran abrazo para ti y tus perillas. Especialmente a Martínez, jeje.

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    1. Martínez está hecha un personaje. Es rubita, más linda! Ayer por fin conseguí que subiera las escaleras a base de sobornarla con una chuche. Es puro nervio la hijaputa.

      Estar en casa es una gozada, y pasear también, y tomar unas cañas en un bareto con los amigos también. Todo eso son cosas que para mí entran dentro de lo normal. Lo que me flipa es esa hiperactividad compulsiva que practica alguna gente en su tiempo de asueto.

      En mi opinión cuanto más vacío existencial tiene la gente más necesita moverse constantemente y cuanto más a gusto están consigo mismos menos meneo necesitan. Y esta máxima se cumple bastante a rajatabla en la gente que conozco.

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