Leo un titular francamente alarmante:
LA BRECHA SALARIAL SE MANTIENE A PESAR DE QUE HAY MÁS MUJERES QUE HOMBRES CON TÍTULO UNIVERSITARIO EN EL MERCADO LABORAL.
Es el tipo de titular que muchas mujeres y no pocos hombres leen y provoca automáticamente una oleada de indignación que hace que se propongan firmemente agarrar una pancarta y ponerse el 8-M a la cabecera de una manifestación pegando gritos que se escuchen hasta en Sebastopol.
Luego estamos otras mujeres y otros pocos hombres que ante este titular pensamos: "espera espera. Antes de agarrar la pancarta lee el resto del artículo, analiza las cifras y ya ves qué haces".
Porque claro, si esto quiere decir que en el mismo puesto y con igual dedicación horaria una mujer cobra menos que un hombre, dame esa pancarta ya.
Quiere decir eso? Ya os lo digo yo. No. La autora del artículo da un montón de datos, sí, pero únicamente referidos al total de salario entre hombres y mujeres. No habla de trabajos concretos ni de las titulaciones universitarias a las que se refiere. Vamos, que a la tía le da igual que la carrera que se haya estudiado sea Biomedicina, Ingeniería Aeroespacial, Enfermería o Educación Infantil. Y que le importa un pimiento que haya titulaciones con mucha mayor valoración en el mercado laboral y le importa otro pimiento que desgraciadamente en esas carreras más valoradas sea minoritario el número de mujeres respecto al de hombres.
Incluso cuando la autora habla muy ladinamente de "grandes desigualdades salariales en el sector sanitario" tampoco dice si se refiere a que los neurocirujanos ganan más que las neurocirujanas o si quiere decir (mucho me temo que sea esto último) que un neurocirujano hombre gana más que una enfermera o que una administrativa, y le importa otro pimiento más que la realidad sea que existen más neurocirujanos que neurocirujanas y muchas más enfermeras que enfermeros.
Esto, amigos, se llama "desinformación".
Estaremos todos de acuerdo en que no todas las carreras tienen la misma dificultad y que por desgracia en muchas de las más valoradas (véase cualquier ingeniería, con una tasa de paro mínima) la presencia de mujeres en las aulas es muy pequeña. Las carreras científico-tecnológicas tienen menos predicamento entre las mujeres, aun siendo las mejor remuneradas. Esto es así. No sé quién tiene la culpa, si es por razones educativas o por tendencias naturales, pero en todo caso se puede hablar de medidas en el campo de la Educación para paliar o revertir estas diferencias; lo que no se puede es dar esta información sesgadamente para que el lector llegue a la falsa conclusión de que las mujeres están siendo peor pagadas que los hombres en puestos idénticos.
Muchas de las informaciones que recibimos hoy en día tienen este claro sesgo ideológico que va encaminado a crear una corriente de opinión determinada. En este caso reforzar el victimismo femenino dando a entender que se produce una injusticia que realmente no se está produciendo.
Ya he dicho muchas veces que yo particularmente no creo que en la sociedad actual, en este país concreto, las mujeres estemos en desigualdad de condiciones con respecto a los hombres. Pienso que podemos conseguir todo lo que nos propongamos exactamente igual que ellos. El único límite es una misma. Y en todo caso los impedimentos pueden venir más por motivos económicos que por desigualdades de género. Pero bueno, respeto que haya tías que piensen otra cosa. Lo que no estoy dispuesta es a callarme cuando se divulgan este tipo de artículos con titulares escandalosos que son puras falacias.
Sí, hay una brecha salarial, y la hay porque aún hay muchas mujeres que tienen trabajos peor remunerados que los de los hombres, y en muchos casos además trabajamos a tiempo parcial en una proporción bastante mayor que la de ellos. Y porque muchas por razones familiares tocan demasiado pronto su techo de cristal y deciden cortar sus carreras en un determinado momento (la maternidad generalmente) en lugar de seguir compitiendo con sus compañeros varones por llegar a puestos directivos. Pero la realidad es que un conserje cobra igual que una conserje, y un cirujano que una cirujana, y una maestra que un maestro, y un ministro que una ministra. Si queremos revertir la brecha tendremos que ser nosotras las que empecemos a optar a esos empleos mejor pagados, no ponernos a lloriquear porque en la suma general de salarios salimos perdiendo.
He dicho.
Machista, facha, y todas esas cosas que se dicen.
ResponderEliminarJajajajajaja, vale.
EliminarLo tengo asumido.
Chico no se dónde trabajas, pero yo conozca muchas ingenieras y cobran lo mismo que los hombres, médicos igual y en todos los ámbitos a igual trabajo, igual salarios
EliminarMachista, facha....es lo que se dice últimamente cuando no se os da la razón
Tita, es mi cuñao.
EliminarEs muy progre el pobre jajajaja
Pues yo que soy su tía estoy totalmente de acuerdo. Cuando yo trabajaba hace cuarenta años y no había tanto feminismo, ganaba lo mismo que mis compañeros y cuando me examiné fui la primera por delante de dos hombres, (UNO DE ELLOS NO ENTRÓ).
ResponderEliminarSe valoraba no el cupo, sino los conocimientos. Así es como tiene que luchar las mujeres
ResponderEliminarSe valora, no el cupo, sino el conocimiento, así es como tienen que luchar las mujeres
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