jueves, 20 de noviembre de 2014

Fuera ya de la enseñanza pública la puta clase de Religión!

Me llama la jefa de estudios del insti:

“Su hijo no ha venido a clase a primera hora, lo sabe usted?”

“Pues sí, me ha dicho que no tenía clase”

“Pues sí que tiene, lo que pasa es que no viene ningún miércoles porque no le da la gana”.

“ Cómo que no va porque no le da la gana?”

“Pues porque hay clase de Religión y los que no dan tienen hora de Alternativa, que es una hora libre para estudiar”.

“Entonces es verdad que no tiene clase”.

“No, porque es hora de Alternativa”.

Y ahí me callo por no liarme a despotricarle a esta señora en plan cabra suiza.

Pero señora mía, qué coño es “Hora de Alternativa"? Eso lo da algún profesor? Qué clase de clase es ésa? Cuál es el objeto de estudio de esa materia?

Madre mía, estoy de la puta clase de Religión y su “alternativa” hasta el mismo moñamen.

Por qué mis hijos tienen que perder dos horas a la semana con una asignatura “fantasma” para que otros niños estudien una cosa que deberían enseñarles en sus casas o en sus parroquias? Qué coño pasa en este país que no hay manera de quitarse de encima en la escuela pública esa reliquia infame que es la asignatura de Religión?

Llevo toda la vida con la misma historia y al final me moriré con las ganas. Han pasado unos cuantos gobiernos y unas poquitas leyes de educación desde que mis hijos empezaron a ir al cole y absolutamente nadie ha tenido cojones para resolver este asunto por la vía más sencilla, lógica y razonable, la de quitar de una puñetera vez la dichosa clase de Religión y mandar a los niños a sus casitas y a sus templos a aprender los rezos y las costumbres de la fe que profesen sus papás. Necesitamos a Podemos ya!!!!!

Estoy en esta guerra desde que mi hija era pequeña, en los primeros cursos de primaria, cuando en clase de Religión, como ella era la única niña que no la daba, la ponían al final del aula, como si estuviera castigada, mientras los otros niños rezaban y entonaban sus abominables y melífluos cánticos. Cuando me enteré de que ésa era la famosa “alternativa” monté tremendo pollo en el colegio y exigí que a mi hija se la sacara de la clase esa hora y que algún profesor se hiciera cargo de ella, que era a lo más que podía aspirar.

Después con los otros dos he pasado por distintas etapas. En sus clases ya había más niños que no daban Religión y en esa hora o aprovechaban para estudiar y hacer deberes o daban la famosa asignatura llamada “Alternativa a la Religión”, que venía a ser como una especie de educación en valores que, supuestamente, deberían sustituir en los niños ateos a los valores religiosos de los niños católicos. Y esta asignatura nos la colaron de estrangis porque los papis meapilas protestaron por que los niños ateos tenian dos horas más para hacer tareas y eso les parecía discriminatorio para sus retoños.

Y ahora viene la tía esta a decirme que mi hijo de 18 años se tiene que pegar un madrugón para perder una hora en el instituto mientras cuatro beatillos granulentos (porque ya en el bachillerato la proporción se invierte y son cuatro o cinco los que se apuntan a esta patochada) aprenden a practicar un culto religioso en una institución educativa de titularidad pública!!!

Y encima los responsables del instituto son tan sumamente torrrrrpes que, en lugar de poner la clase de religión a media mañana para que así los niños “malos” tengan que permanecer en el centro sí o sí, tanto si quieren como si no, van y la ponen a primera hora o a última. Panda de mataos! Menudas lumbreras!

Pues no, no voy a pedirle a mi hijo que se levante y vaya a primera hora al instituto. Lo que voy a hacer es escribir un justificante diciendo que no puede asistir los miércoles a primera hora por "asuntos familiares". Y sacaré una copia cada miércoles, la firmaré y se la daré para que se la plante en las mismas narices a quien quiera obligarlo a perder su tiempo de esa estúpida manera.

Sí, me subo por las paredes, qué passsssa? 20 años ya batallando contra este despropósito dan para eso y para más. Ya está bien, coññññño!!!!

7 comentarios:

  1. Comparto tu indignación. Llevo desde que tengo uso de razón combatiendo como humildemente puedo toda esa basura, y nada, que parece una guerra perdida. Aunque por supuesto si nos rendimos sí que estaremos perdidos; no queda otra que seguir batallando.

    Fíjate que ni siquiera creo que Podemos arregle el asunto, de tan enquistado que está en nuestra sociedad de borreguitos.

    Y si supieras lo que aún pasa en mi trabajo con respecto a la religión (al catolicismo más concretamente) fliparías. Pero de eso mejor no hablo que luego me regañan, y es que hay cosas que son intocables en este católico país.

    En el trabajo me tengo que morder la lengua (llenita de llagas la tengo), pero en mi vida privada combato estas cosas de la mejor manera posible: divulgando el pensamiento crítico. Desde hace años tengo siempre en casa un par de ejemplares de El Espejismo de Dios para regalar. Cuando se me agotan encargo más. La verdad es que tampoco regalo muchos porque casi nadie tiene el execrable vicio de la lectura, pero por mí que no quede. Ese libro, a mi juicio, debería estudiarse en las escuelas.

    En fin, ya me he desahogado un poco.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues sí, Kowalski, en este país de mierda creo que ésta es una batalla perdida. O por lo menos hasta ahora lo ha sido.

      El PSOE siempre que está en la oposición vuelve a sacar a relucir los putos acuerdos con la Santa Sede pero en cuantito que llega al poder siempre hace lo mismo, comerle la polla a los obispos y darles en bandeja todo lo que pidan y más. Jamás ha estado la Iglesia mejor que cuando han gobernado los socialistas, y para todo el que los haya votado alguna vez (que es mi caso) duele, porque una de las cosas por las que los había votado era para que abordaran de una vez este asunto. Desde luego no volverán a ver una papeleta mía de su partido en las urnas.

      Yo confío ciegamente en que si Podemos llega al poder una de las primeras cosas que hagan sea plantear de una vez por todas que esto es un estado laico y que el que quiera practicar una religión, la que sea, que lo haga en su casa y en los templos habilitados para ello. Y que a los demás nos dejen en paz, coññño.

      Eliminar
  2. Vaya tela, no sé si entrar a matar o morir por dios. Es cuestión arduamente complicada, y a pesar de los pesares es cierto y verdad que la Norma Suprema contempla la laicidad del Estado...pero qué estado?? Porque a mi entender aunque formalmente no esté materializado funcionamos como un estado federal...uuuiii!! Tampoco ésto ha sido abordado con la importancia que merece.
    Estoy totalmente de acuerdo con las opiniones vertidas, principalmente con d. Leónidas, aunque en líneas generales también con la sra. Folckorica.
    Hay como suele pasar, una excepción. Podemos me huele a hiel, a vísceras de uruk-hai...
    Una Abadesa comprometida

    ResponderEliminar
  3. No pretendía ser repetitiva, pero visto la línea de este espacio creo que está más que acertado,

    ResponderEliminar
  4. Y entonces me dí cuenta de que eran más fuertes que nosotros, porque ellos podían soportar eso... ellos no eran unos monstruos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ajá, bien traído. Por cierto, no hace mucho compré la versión Redux, de tres horas y media, y me encantó descubrir alguna de esas escenas cortadas en la anterior.

      Tampoco hace mucho que leí la novela en la que se basa el guión (El Corazón de las Tinieblas, Joseph Conrad) y —llámame criminal si quieres— me pareció un truño la hostia de aburrido.

      Eliminar