martes, 26 de febrero de 2013

Traduciendo a Cospedal

Todos hemos podido ver estos días la especie de alergia asmática combinada con erupciones cutáneas que sufren gran parte de los dirigentes del Partido Popular ante la sola mención del nombre de su extesorero Luis Bárcenas. Sabemos que Mariano Rajoy ha hecho promesa para no pronunciar su nombre y que otros dirigentes, como Carlos Floriano,  entran en modo sanvito cuando le preguntan por su antiguo correligionario. Incluso se rumorea por ciertos mentideros que han contratado al presidente de la Asociación Española de Logopedas para que ayude a la directiva a pronunciar la palabra Bárcenas de forma inteligilble y sin balbucear.

Pero de todas las muestras de dificultad psicofonética que nos han dado los líderes populares estos días, la que se lleva la palma, sin duda, es la Secretaria General del partido, Dolores de Cospedal, que cuando fue interrogada por la prensa sobre la relación laboral del ex-tesorero con el partido respondió tal que así:

"Vamos a ver, eh, la indemnización que se pactó fue una indemnización en diferido, y como... fue una indemnización en dife... en diferido en forma, efectivamente, de simulación de... simulación o de lo que hubiera sido... en diferido, en partes de una...  lo que antes era una retribución, tenía que tener la retención a la seguridad social que si no hubiera sido... Ahora se habla mucho de pagos que no tienen retenciones en la Seguridad Social ¿verdad? Pues ahí se quiso hacer, como hay que hacerlo"

http://www.lasexta.com/noticias/nacional/presentara-esta-semana-sus-acciones-judiciales-caso-barcenas_2013022500127.html

Como sé que la comprensión de estas palabras puede entrañar cierta dificultad para personas no familiarizadas con el argot del derecho laboral, voy a intentar traducirlas para el lector profano:

"Vamos a ver, la indemnización fue pactada en forma  diferida, es decir, era un pago a la Seguridad Social que no formaba parte de la retribución habitual sino de la simulación del pago. Esto significa que no se simuló la retribución, sino la simulación del pago en diferido, que representa una indemnización en clave de retenciones ya recibidas. Si la indemnización no hubiera sido pactada con disimulo, efectivamente, no hubiera sido diferida y transcurriría en tiempo presente junto con los pagos atrasados que representan las cotizaciones a la Seguridad Social. Aunque no del todo, claro".

Uffffffff, creo que no. Voy a intentarlo de nuevo:

"Vamos a ver, para hacer esto como hay que hacerlo, es decir, como la ley determina que debe hacerse, no puede hacerse en directo sino que hay que pagar las retribuciones en diferido porque la Seguridad Social tiene una parte según la cual las retenciones no se admiten en la realidad sino que son simulaciones de pagos en metálico con carácter retroactivo. Esto significa que transcurren en la imaginación del receptor de la indemnización aunque el simulacro no afecta a la virtualidad mental del afectado sino a la realidad ulterior mediante la cual se produce dicha retención. En otras palabras, que no es tal como pueda parecer sino que hay una apariencia tras la cual se representa esa realidad."

Mmmmmm, tal vez debería aclarar aún  algún concepto que ha podido quedar algo confuso:

"Vamos a ver, no se puede decir que la virtualidad no sea en el fondo una realidad porque la ficción representa la misma esencia que quiere simular. Lo que quiere decir que nadie es diferido en la práctica sino que cobra pero no lo sabe. Si lo supiera sería real pero al no saberlo es como si esa retribución no fuera percibida, aunque sí lo es. Pero lo es sólo en forma disimulada, por lo cual el cobro de esta retribución no puede considerarse ilegal puesto que existe, sí, pero sólo en la virtualidad de la realidad económica del individuo, es decir, en un mundo paralelo que se acopla a las expectativas del sujeto en tanto los cobros a través de la Seguridad Social se hayan producido. Otrosí, el efecto que se deduce de este proceso se acopla al mercado laboral al que el sujeto regresa en el momento en el que la parte contratante de la primera parte percibía sus retribuciones de forma periódica y no coyuntural, pero todo eso en la práctica no representa ninguna ilegalidad, porque se hace lo que se tiene que hacer conforme a la legislación laboral diferida. Y además la simulación es sólo disimulada, o sea" 

Ufffffff, ahora sí, creo que ha quedado lo suficientemente claro. No creáis que es fácil traducir a Cospedal, que tiene su intrínculis la cosa.

Bueno, y lo último es que Bárcenas ha demandado al PP por despido improcedente. Pero tranquilos, cuando Cospedal lo explique yo os lo traduzco.

6 comentarios:

  1. Cada vez entiendo menos. Si en lugar de Bárcenas fuera un currito de a pìe de máquina, esto se había acabado hace años. ¿Es que no constan registros en la seguridad social que en 5 minutos te indican el historial laboral de cualquier individuo? Ahí es donde se vería claramente una de las mil mentiras y declaraciones que provocan verguenza ajena que hemos visto estos días.

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  2. pues a mi, ahora, me acaba de quedar clariSIsíSImo....

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  3. Son gentuza y como tal se comportan.Estamos esperando una reaccion clara y precisa por parte del partido que nos gobierna y un mes despues no ha hecho absolutamente nada. Hasta hace dos dias nos hablaban de que para superar esta crisis teniamos que vender la marca "España"...¿y ahora que?¿la malvendemos?porque me imagino que en el resto del planeta se tienen que estar descojonando de nosostros como yo he hecho hasta hace bien poquito de Italia o de Argentina y de sus corruptos politicos.Hoy por hoy agacho la cabeza y asumo la mierda que me rodea

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  4. Bueno, hombre, no te lo tomes tan así. Al menos son divertidos y nos podemos reir con ellos. Mucho peor sería que ni siquiera tuvieran la menor gracia.

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  5. "PANDILLA DE RATEROS"


    Gala brama contra la "casa de putas" de la política española


    El Semanal Digital

    10 de agosto de 2013



    El escritor no acostumbra a tener pelos en la lengua en su Tronera de "El Mundo", pero esta vez se supera a sí mismo cargando las tintas contra los "políticos de mierda" de este país.



    Es habitual leer a Antonio Gala cargar las tintas contra la clase política en su Tronera, pero esta vez se ha superado a sí mismo. Tal vez los calores del mes de agosto le tengan especialmente encendido.

    Sea como fuere, el escritor suelta sapos y culebras en una columna titulada Reptiles en la que denuncia que España se ha vuelto "irrespirable". "Todo el país está abochornado por una inconmensurable pandilla de forajidos", brama.

    Las últimas líneas son las más fuertes. En ellas no duda en calificar la política como "una casa de putas" y se lamenta por España. Porque, a su juicio, "no se merece, por ligera de cascos que sea, estar desgobernada por esta pandilla de rateros engreídos". Y a renglón seguido se pregunta: "Dónde poner los ojos? ¿En quién volver a confiar? Malditos sean estos políticos de mierda".

    Gala hace un repaso por los EREs, Bárcenas, Palau y demás escándalos y señala que a los españoles les oprime "la vergüenza", que están "enfermos y asqueados". "Dan ganas de llorar, de esconderse para que no nos abrume la vergüenza". Y lo peor, según él, es que no hay donde mirar sin encontrar "ladrones y vendidos".

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