A estas alturas no es un secreto para nadie que PP y PSOE la misma mierda son a nivel corrupteril. Para los progres tal vez el PP es un poco más mierda por su carga de meapilismo, capillismo y connivencia con el lobby episcopal pero vamos, que en cuanto a corruptelas se refiere van muy a la par, y creo que eso poca gente lo discute.
Lo que pasa es que si se quiere comparar cosas similares, se comparan cosas similares. Y así, por un lado irían los delitos, que equiparan a Bárcenas con otros delincuentes de su estilo: los EREs andaluces, FILESA, Naseiro, los Gürtel, los Jaume Matas, la financión ilegal de Unió, Urdangarín, etc.
Y por otro lado irían los casos como el de Amy Martin, la famosa escritora fantasma de la Fundación Ideas, ex-esposa del director de la citada fundación, que no es una delincuente, sino que es otra cosa: una listilla, una vividora, una vivalavirgen, una espabilá de la vida,... llámala X. Que también este tipo de personajes prolifera en todos los partidos y en todas las facetas de la vida, pero que no han traspasado, que se sepa, el límite de lo legal, quedándose en lo meramente inmoral o éticamente discutible. Por tanto incomparables con Bárcenas and company, que han traspasado ese límite con creces y con vocación de campeonísimos .
Amy Martin, alter ego fantasmal de la polifacética artista conocida como Irene Zoé Alameda, es una tía que se ha estado forrando a base de escribir artículos superpestiños que le han pagado a precio de Nobel, pero mientras sólo sea eso, y ese dinero lo haya declarado al fisco, no hay delito por ninguna parte. Lo que hay es una caradura que sería impresionante si no fuera porque ya a estas alturas impresionan poco estas caras tan duras, a fuerza de encontrárnoslas a todas horas por todas partes.
Lo que sí me temo es que la rocambolesca y divertida historia de Amy le ha venido muy bien a Bárcenas y al PP porque durante unos cuantos días el gravísimo caso de los 22 millones y los supuestos sobres serie B ha quedado como difuminadillo, ante la brillantez indiscutible de la bella Irene Zoé.
Hombre, tanto es así que El Mundo, que es mi diario de cabecera, ha hecho un auténtico homenaje fotohagiográfico a Zoé. No he visto mayor fascinación en mi vida. Los primeros días fueron fotos de la señora esta estupenda con su fantástica y cuidadísima melena rubia pijiprogre, pero fue descubrir las veleidades gótico-videocliperas de la nena y se han convertido en un verdadero club de fans, cambiando cada minuto unas fotos por otras; yo creo que han publicado todo el album familiar de esa muchacha; unas mil o por ahí han debido de colgar. De paso nos han contado su curriculum de pe a pa, todos sus trabajitos artísticos, cinematográficos, literarios, musicales...
Y curiosamente, conforme el espacio de Amy aumentaba, el de Bárcenas se iba diluyendo en el espacio de los segundones que nunca llegarán a nada en esto de lo mediático. Casualidad? Bueeeeeno! Fascinación por nuestra renacentista pija gótica, a la que han llegado a calificar como la Da Vinci posmoderna? Psssss, vete tú a saber! En todo caso, curioso cómo una simple aficionadilla al clientelismo ha podido desbancar en tan poco tiempo en los medios a un pedazo de campeón del guante blanco. Qué cosas, tú!!!!