sábado, 29 de abril de 2017

Feministas de pacotilla

Veo el programa Zapeando justo cuando comentan una noticia sobre cierta línea aérea que exige a sus azafatas una determinada presencia física y una vestimenta que los comentaristas del programa consideran "machista", con toda la razón, no seré yo quien lo niegue.

También hace unos meses se criticaba en espacios como "El Intermedio" o "La Sexta Noche" a una clínica privada que imponía a sus enfermeras un uniforme "clásico" que chocaba con las tendencias actuales que priman la comodidad sobre el supuesto encanto fetichista del traje tradicional que toda la vida han usado las profesionales del gremio.

Comparto la indignación de todos estos presentadores, colaboradores y comentaristas. Para ser azafata o enfermera no debería ser ningún handicap el aspecto físico y estas profesionales lo normal, lo deseable, lo lógico sería que cumplieran con sus funciones llevando la indumentaria más práctica y cómoda para ello. Eso de tener a una azafata horas y horas de pie llevando zapatos de tacón y ropa ajustada que casi no le permite moverse en estos tiempos está totalmente de más. No digamos ya a las enfermeras, que encima tienen un trabajo muy duro y a menudo desagradable. Imponerles una vestimenta sexi no es ya solo que sea machista e intolerable, es que además es cruel. Tratar de salvar la vida de un paciente que acaba de padecer un ataque cardiaco procurando que no te asomen las bragas por debajo del uniforme o que no se te salgan las tetas por el escote no debe ser plato de gusto precisamente.

Y una vez aclarada mi postura, vamos al ajo. Lo que realmente me hace gracia de todo este asunto es que en todos estos programas que se muestran tan indignadísimos por el trato vejatorio que en tales empresas se da a la mujer, las presentadoras responden exactamente a ese mismo prototipo!!!!! Son todas mujeres esbeltas, delgadísimas y guapérrimas que llevan sistemáticamente ropa ajustada y zapatos de tacones altísimos y que permanecen durante horas y horas de pie ante las cámaras con tal indumentaria, no precisamente caracterizada por su comodidad.

Me parece graciosísimo que la presentadora de "La Sexta Noche", que va embutida en unos vestidos imposibles diseñados para destacar sus curvas y con unos taconazos que harían tambalearse a la top model más experimentada, comente con cara de pocos amigos y una aparentemente profunda indignación las exigencias de la compañía aérea machista o de la clínica privada que quiere en sus filas sólo enfermeras guapas y sexis. A ver, bonita,  tú crees que si pesaras 15 kilos más y exigieras trabajar con una ropa algo menos llamativa estarías ahí, por muy buena periodista que fueras?

Justamente la Sexta  es una cadena que se caracteriza por contratar de forma sistemática a periodistas y presentadoras espectacularmente guapas, jóvenes y delgadas. Con ellos no tiene tanto miramiento, pueden sobrepasar la cincuentena tranquilamente, peinar canas y hasta bizquear si se tercia, pero en lo que a las chicas se refiere la media de edad no creo que sobrepase los 35; es complicado encontrar en sus programas a una sola presentadora que sobrepase esa edad, y por supuesto, deben responder al canon estético por el que apuesta la cadena.

En fin, es tan descarada la contradicción, tan absurdo que unas tías que presentan un programa con escotazos de infarto y minifaldas que dejan poco espacio a la imaginación, se dediquen a criticar a empresas que exigen a sus trabajadoras exactamente lo mismo que la suya les exige a ellas, que da hasta risa.

Supongo que no soy yo la única que se ha percatado de esta sinrazón pero como no he leído ni escuchado a nadie comentarla en ningún medio me ha parecido oportuno, incluso imprescindible, traerla a colación yo aquí.

No es que mi blog lo lea mucha gente pero al menos los pocos que lo leen que caigan en la cuenta de la tremenda paradoja, y que además lo hagan constar cuando comenten esos programas con sus amigos y familias, o por las redes sociales. Que no parezca que somos completamente imbéciles y que nos pueden colar cualquier cosa sin que pestañeemos ni un momento ante la poca vergüenza con la que nos venden ideas supuestamente progresistas que los propios medios son incapaces de respetar.


jueves, 27 de abril de 2017

Corrupción

Las últimas noticias sobre la corrupción endémica en el PP madrileño que han llevado incluso a la dimisión de la incombustible Esperanza Aguirre (por cierto tercera dimisión, aunque parezca un chiste) sobrepasan ya todo lo imaginable y lo políticamente soportable.

Hablamos ya de una putrefacción a nivel institucional que rebasa con creces lo puramente personal. Lo que habría que preguntarse a estas alturas es si queda algún órgano en el PP no tocado por la plaga, algún órgano medianamente sano.

Las conversaciones intervenidas al Ministro de Justicia  Rafael Catalá y al Secretario de Estado de Seguridad José Antonio Nieto, ex-alcalde de Córdoba por cierto, son verdaderamente escandalosas. Que si tranquilo, que este juez es de los nuestros, y al fiscal lo controlamos... ese tipo de comentarios que delatan la existencia de una mafia política totalmente incompatible con una democracia.

No sé los votantes del PP hasta dónde están dispuestos a soportar. Parecen tener unas tragaderas sin fondo. Le pasaron factura (facturilla, diría yo) en las elecciones del 2015 pero perdonaron con una rapidez inusitada y ya en las de junio se volvieron a tirar al barro y pelillos a la mar.

Ya sé que lo que hay al otro lado no es precisamente para tirar cohetes. El PSOE ya se ve cómo está, totalmente partido en facciones irreconciliables que mucho me temo terminarán en ruptura definitiva; Podemos haciendo el payaso día sí día también con sus tramabuses y su política-show que ya sólo convence a sus incondicionales; lo único medianamente presentable hoy por hoy a nivel nacional es Ciudadanos, un partido que aunque a muchos no les gusta por su indefinición ideológica, a estas alturas puede que sea ése precisanente su principal valor, aparte de que han sido los únicos que han hecho valer su representación en muchas alcaldías y comunidades para hacer dimitir a gente implicada en casos de corrupción. Y eso para mí hoy por hoy es un punto a su favor muy importante.

Pero bueno, que si eres votante pepero y no quieres votar a ninguno de éstos yo lo puedo entender, pero la abstención también está ahí, es una posibilidad. Cualquier cosa es buena menos votar al PP. Cómo es posible que con todo lo que se está sabiendo de la mierda que hay ahí metida todavía haya gente dispuesta a votar a ese vertedero de basura?

No, no creo que la solución sea una moción de censura, como propone Podemos, para colocar en su lugar a un gobierno apoyado por otros partidos igual de corruptos, como la antigua Convergencia, que no es mucho más ejemplar que el propio PP; la alternativa no creo que sea ésa. El invento del "Junts per si" en Cataluña ya se ve el resultado que ha tenido. Un "Juntos contra el PP" a nivel nacional no saldría mucho mejor, con un montón de partidos revueltos cada uno de su padre y de su madre sin otra cosa en común que querer quitar a uno de en medio. Éste es un invento más del showman Iglesias para poner en evidencia al PSOE, que lógicamente ahora no está ni para mociones ni mucho menos para nuevas elecciones.

Lo que creo es que este estado de cosas es insostenible por mucho más tiempo, y ya plantearse una legislatura larga es imposible. Con un partido en el gobierno enfangado hasta el pescuezo, el control de las cámaras es fundamental, hay que dejarlos moverse lo menos posible (y su minoría en el Parlamento no les deja muchas opciones) y estar muy atentos a sus tejemanejes en las demás instituciones, sus injerencias en la Justicia y en otros ámbitos de poder. A esta panda hay que tenerla bajo vigilancia intensiva el tiempo que todavía les quede en el gobierno.

Lo triste es que probablemente si el año que viene o el siguiente hubiera nuevas elecciones probablemente volverían a ser el partido más votado. Es algo difícil de explicar pero no tengo muchas esperanzas de que las cosas cambiaran demasiado. Por el motivo que sea hay un montón de gente dispuesta a seguir votando al que es sin lugar a dudas el partido más corrupto de la UE, al menos el que tiene a más miembros envueltos en distintas causas judiciales que huelen a cuál peor.

Si eso volviera a suceder, si a pesar de todo lo que ya se sabía de antes, lo que se está sabiendo ahora y lo que sin duda se sabrá en el futuro, la gente siguiera apoyando mayoritariamente a ese partido, ya no habría palabras para definir el grado de vergüenza que sentiría por este país del que me consideraría totalmente ajena. De hecho ya me considero muchas veces, pero todavía a estas alturas, a pesar de todo, sigo teniendo una pequeña esperanza de que haya un cierto nivel de pundonor ético colectivo que impida que algo así pueda ocurrir otra vez.

Probablemente una vana ilusión, lo sé.

martes, 25 de abril de 2017

Ay Lola Lolita Lola!

Hoy he tenido una experiencia traumática, me he quedado nuevamente en estado de shock.

Lola se ha escapado, la he perdido.

Durante un buen rato no me lo podía creer, se había idooooooooo!!!!!! Mi perrillaaaaaaa!!!!

Estaba toda conmocionada. Pero ha llegado un momento en el que he sido consciente de que no la podía encontrar, imposible.

Me puse a dar vueltas por nuestros lugares de paseo,  convencida de que la vería en cualquier momento corriendo hacia mí. Pero el tiempo pasaba y pasaba... y no aparecía. Al cabo de una hora me rendí y volví a casa. Cansada, derrotada, muerta.

No me pilló por sorpresa; se escapaba constantemente. Ya lo conté el otro día: rompía correas, collares, bozales... No es perra para estar atada. No creo ni que Borja Capponi pudiera hacer nada para solucionar eso.

Hasta el día de hoy se iba y volvía al momento, como mucho tardaba un minuto en aparecer. Pero esta vez no, esta vez se había ido de verdad.

Cuando llegué a casa estaba derrotada, hecha unos zorros, con la moral por los suelos... pero algo me decía que iba a volver. Sé que a posteriori es fácil decirlo pero es que es verdad, lo sabía!!!!!!

Varias veces me asomé al balcón pensando que estaría allí. Pero no. No volvió a casa; volvió al lugar justo desde el que se fue. Yo la dejé atada en la puerta del supermercado y allí volvió. Justo al sitio en el que me vio por última vez. Es un crack de perra, hossstia!

Me llamaron a casa cuando ya casi casi casi estaba por darla por perdida.

- Inma?

- Sí.

- Soy Margarita.

Margarita es una amiga de mi hija del barrio. Lo supe de momento.

-  Es por mi perra?

- Sí, bueno, yo no lo tengo, pero alguien la ha cogido y está aquí.

- Bajo enseguida.

Volvió!!!!!!! Volvió al sitio desde el que partió!!!! La encontraron tranquilamente sentada en la puerta del super. Y yo lo sabía!!!!! Juro que sabía que la encontraría, lo tenía más que claro.

La había visto desaparecer tantas veces antes que no tenía dudas. Tenía un poco de miedo, por si se iba a la carretera o algo así, pero estaba segura de que no, de que solo se había ido a pegarse un garbeo por ahí, a su bola.

Cada día lo veo más claro con Lola; tengo que dejarla libre. Ella no puede estar atada. No puedo estar sentada en un bar y quedarse quieta a mi lado. Lo he intentado de todas las maneras pero es imposible, se escapa, se siente atrapada, no quiere. No quiere caminar atada, no quiere correas; quiere correr, quiere volar!!!!!!!

Bimba no es así; ella es muy tranquila; es una perra ideal para pasear, para sentarse con ella en un bar, para tenerla en el regazo hecha un ovillo.

Nunca conseguiré eso de Lola, haga lo que haga. Porque ella no es así. Creo que los perros, como las personas, diga lo que diga Borja Capponi, también tienen su forma de ser, su temperamento, su carácter. Lola no es Bimba ni Bimba es Lola. Ni yo puedo pretender que sean iguales, que actúen lo mismo, que sean las perras ideales de mis sueños.

Yo puedo educar a Lola para que sea una perra sociable, para que conviva con nosotras y para que se comporte con los otros perrillos, pero nunca podré domar su temperamento libre. Lo he ido viendo claro cada día, pero lo de hoy ha sido la revelación absoluta.

Tengo una amiga que siempre lleva suelto a su perro.  Ella se sienta en un bar, se toma un café o una cerveza y deja que el perro corretee. Y él va como las balas de aquí para allá, pero siempre vuelve al lado de su dueña. Se puede ir al quinto carajo pero siempre aparece. Yo creo que Lola es igual. Y comprenderlo y aceptarlo ha sido un verdadero alivio.

Es como cuando aceptas que un hijo es como es, y dejas de presionarlo para que sea como tú quieres. O un novio, o un marido.

Es esa tranquilidad que entra cuando asumes que no está en tu mano cambiar las cosas, sino asumirlas, aceptarlas e intentar vivir con ellas tal y como son.

Lola es un espíritu libre. Sencillamente. No puedo mantenerla atada.

Pero le gusta su hogar. Sabe dónde está y ha decidido volver siempre a casa.

Ahora sí siento de verdad que es MI PERRA.

lunes, 24 de abril de 2017

Vecinos

Como ya he comentado más de una vez, recientemente han llegado a mi edificio unos vecinos especialmente fogosos.  Con demasiada frecuencia para mi gusto y a todo tipo de horas estos enardecidos amantes dan rienda suelta a su pasión y parecen haber decidido compartir sus momentos de gloria con el resto del vecindario.

La misma noche en la que murió mi Manolo tal vez recordéis que en el post que escribí en pleno estado de shock comentaba que mis vecinos estaban faenando su amor, y hasta narré en vivo y en directo el momento del clímax. Tened en cuenta que no tenía cosa mejor que hacer esa noche que llorar y escuchar el consolador "sonido del silencio".

En resumidas cuentas, que tras varias noches, madrugadas y siestas escuchando las efusiones amorosas de mis nuevos vecinos me decidí a escribir una nota y colgarla en el portal:

SE RUEGA A LOS VECINOS QUE MODEREN EL VOLUMEN DE SUS EXPANSIONES AMOROSAS EN LA MEDIDA DE LO POSIBLE.

EL ESPECTÁCULO SONORO UNA VEZ ES DIVERTIDO, DOS, TRES... A LA QUINTA SI NO ERES AFICIONADO AL PORNO CASERO RESULTA CANSINO.

POR FAVOR, PRESERVEMOS EL EDIFICIO DE UNA CONTAMINACIÓN ACÚSTICA INNECESARIA. DE VERDAD, SE PUEDE PASAR GENIAL SIN QUE SE ENTERE TODO EL VECINDARIO

GRACIAS.

PS. OBVIAMENTE ESTA NOTA NO LLEVA FIRMA POR MERA DISCRECIÓN, PARA NO SEÑALAR A NADIE.

Puse esta nota en el portal y al día siguiente había un comentario adicional que decía "Viva el amor" y varios besos de carmín. Luego alguien quitó el cartel.

Al principio pensé que había tenido éxito porque no había vuelto a repetirse la molesta situación. Pero esta tarde intentaba dormir la siesta en mi sofá tan ricamente acompañada de mis perrillas cuando de repente:

- Aaaah, aaaah, aaaaahhhhh, ayayayayayayay, ah ah ah ah ah, aaaaaaaaaaahhhhh, ahhhhhhhh oooooooooohhhhhh uuuuuuufffffffffff aaaaaaaaaahhhhh oooooooohhhhhh siiiiiiiiiiiiii aaaaaaaaaahhhhhhhh ooooooohhhhh ayayayayayayayayyyyyyyyyyyyyyy siiiiiiiiiiiiii aaaaaaaaahhhhhhhhhh

Hosssstiasssssss noooooooo! Otra vez!!!!!

De verdad, es supercansino, palabrita.

Nuevo cartel al canto:

QUERIDOS VECINOS:

DADO EL ESCASO ÉXITO OBTENIDO EN MI ANTERIOR LLAMAMIENTO A LA MODERACIÓN EN LAS EFUSIONES AMOROSAS,  HE PENSADO QUE PODRÍAMOS LLEVAR A LA JUNTA DE VECINOS LAS SIGUIENTES PROPUESTAS:

1. CAMBIAR LA DENOMINACIÓN DEL EDIFICIO. EN LUGAR DE BLOQUE B PODRÍAMOS LLAMARLO "BLOQUE DEL AMOR".

2. PROPONER FORMALMENTE A NUESTROS FOGOSOS VECINOS QUE TAN GENEROSAMENTE NOS HACEN PARTÍCIPES DE SUS EFUSIONES QUE SE GRABEN Y NOS PASEN A TODOS CONSTANCIA VISUAL DE SUS APASIONADOS  ENCUENTROS PARA QUE ASÍ, ADEMÁS DE DISFRUTARLOS EN MODO AUDIO, PODAMOS GOZAR VISUALMENTE DEL ESPECTÁCULO.

3. IGUALMENTE PODRÍAMOS USAR LOS APASIONADOS CLÍMAX DE NUESTROS VECINOS COMO HILO MUSICAL EN EL PORTAL PARA DAR LA BIENVENIDA DE UN MODO ORIGINAL A NUESTROS AMIGOS Y FAMILIARES CUANDO VENGAN A VISITARNOS. AH AH AH OH OH OH UFFFFFFFF!  MUCHO MEJOR QUE ESE MOLESTO SILENCIO QUE REINA ACTUALMENTE EN EL PORTAL.

ESTA NOTA QUEDA NATURALMENTE ABIERTA A MÁS PROPUESTAS QUE SIRVAN PARA ANIMAR LA VIDA SOCIAL DEL EDIFICIO.

UN AFECTUOSO SALUDO A TODOS, Y QUE VIVA EL AMOR!

INMA (2º-4)

Ya lo dice la sabiduría popular: Si no puedes con ellos, únete a ellos

Por supuesto he pegado un beso de carmín en el cartel. Faltaría más!

Ooooooooh, l'amour!


sábado, 22 de abril de 2017

El bozal educativo

El bozal educativo, también llamado bozal de castigo, bozal de adiestramiento o top trainer, es un bozal que usan los adiestradores caninos para que los perros no peguen tirones de las correas, no se distraigan, no se muestren agresivos, no ataquen a otros animales, etc.

Mi Lola, Lola Lolita la Tironera, ha tardado exactamente un cuarto de hora en cargarse el bozal educativo que le he comprado con toda mi ilusión y con todas mis esperanzas.

En la última semana Lola se ha cargado tres collares de perro. Uno partido por la mitad, otro roto por el aro; y el tercero por el broche que sujeta el aro. Todo ello a tirones; el bozal educativo no, ése ha sido a bocados. Por si había alguien que pensaba que yo exageraba sobre sus habilidades tironeras y destructivas he aquí la prueba. Estoy por llevarla al Got Talent, no digo más.

Hablamos de una mierda perra de cinco kilos. No quiero ni pensar lo que hará un Rottweiller rabioso con un bozal de éstos o con los collares normales para perros.

Cuando Lola rompe un collar o el bozal educativo sale toda disparada corriendo y es inútil llamarla. Es el Usain Bolt del mundo perruno. No corre... vuela. Me pregunta una amiga si se va a la carretera. Pues no lo sé, no consigo verla, desaparece de mi vista en cuestión de milésimas de segundos, llega al final de la calle y da media vuelta y reaparece.

La primera vez que lo hizo me cagué viva y empecé a correr detrás de ella desesperada gritando. Un señor que pasaba por allí me regañó: "nunca hagas eso, no demuestres que estás nerviosa ni grites ni corras; llámala con autoridad y punto".

Desde entonces hago como que mantengo la calma, la llamo con autoridad y no corro ni chillo ni nada; sólo cierro los ojos y rezo para que reaparezca. Tampoco conseguiría nada si corriera detrás de ella, jamás la alcanzaría. Y estoy empezando a creer en un ser superior porque siempre ha vuelto. De momento.

Lo tengo cada vez más claro: Lola es un espíritu libre. Ella necesita correr, volar como el viento...  probablemente ha vivido siempre así, y una correa para ella es una tortura. Lo sé porque en casa, cuando va suelta, es un amor. Es cariñosa, mimosa, pizpireta... Mis hijos flipan con ella. No es posesiva ni antipática ni temerosa ni ladradora como Bimba. Pero no intentes amarrarla porque siempre buscará la forma de liberarse. En fin, un calco de su dueña. Si es que es mi alma gemela perruna, cagoenlahosssstia!!!

Se parece a mí en todo; también es imaginativa y le encanta inventar. Ha ideado todo tipo de sistemas para destrozar lo poco que tiene a tiro. En el mes y pico que lleva en casa lo ha intentado con el sofá, su camita, la camita de Bimba, pinzas de la ropa, cualquier tipo de papel que se le ponga a tiro, muebles, klínex... absolutamente todo.

Ayer estuve escuchando en la radio un programa sobre perros destructivos y la verdad es que fue un tremendo consuelo. En esta vida quien no se consuela es porque no quiere. Hay perros que destrozan puertas, que se comen gallinas, pájaros en sus jaulas, jamones colgados del techo, sillas de montar a caballo, raquetas de tenis y de pádel, y por supuesto cortinas, zapatillas, zapatos, calcetines y demás material fungible que se les ponga a tiro. Hay incluso perros que se comen cables enchufados y que se acostumbran a las descargas eléctricas... y les gusta! Escuchando el programa casi me sentí afortunada. A fin de cuentas mi perra destroyer sólo pesa cinco kilos; con cinco más no sé qué sería capaz de hacer.

Además del bozal correctivo destrozado compré para las perrillas en una tienda especializada unos juguetes de entretenimiento en los que se meten chuches. La verdad es que de momento funcionan bastante bien. Ahora mismo las tengo a cada una en su camita sin destruir ni inventar nada, intentando como locas sacar la chuche del recipiente. Bimba tiene un vicio que no veas; Lola menos, ella se cansa antes si no obtiene resultados inmediatos. Pero este artilugio ha conseguido incluso que Bimba me deje acariciar a Lola tranquilamente, porque está tan a lo suyo intentando dominar la cosa que pasa de intentar dominarme a mí, lo cual no deja de ser un pequeño triunfo en esta guerra de poder a tres bandas que no he dejado de celebrar.

No dejo de alucinar con mis nenas. Ni de sufrir. Las observo con mirada de entomóloga enamorada. Intento hacer como Borja Capponi, ponerme en la piel de ellas, pensar como ellas, sentir como ellas. Es muy probable que pronto empiece a ladrar como ellas también. Igual así me entienden mejor. Podría ladrar como el abogado de "Un ángel pasó por Brooklyn", pero no para asustar a la gente sino para comunicarme con mis perrillas.

Hoy me ha dado mucha pena. Iba con ellas por la calle y cuando nos hemos cruzado con la perrilla Baffy y con su dueña ésta ha dicho: "Cuidao Baffy que viene la loca". Se refería claramente a Lola, que es la que se tira para Baffy en cuanto la huele. Pero me ha dolido como si paseara con un hijo mío y alguien dijera: "Mira, el tontito, o el gordito, o el autista".

Es increíble lo que se puede querer a los animales y lo que duelen. Yo sé que mi perra es una destroyer. Ahora mismo se ha cansado del buscachuches y está intentando comerse el cable del teléfono. Y por mucho que esté convirtiendo el salón en un búnker, intentando quitar de enmedio y poner a buen recaudo todo lo que pueda ser objeto de su deseo siempre habrá algo de lo que pueda tirar o que se pueda comer. Y sin embargo la quiero muchísimo. Y me muero de pena de pensar que la gente la ve así, como una perra agresiva y mala.

Entiendo perfectamente lo que decía uno de los dueños de perros que intervenían en el programa de radio. Siempre tuvo ilusión de tener un San Bernardo. Le parecían perros amigables, sociables y perfectos para cuidar de sus otros animalitos. Pero el San Bernardo le salió rana. Éste es el que se comió a las gallinas y el que se ha cargado media granja del dueño y la casa casi entera. Y puede que fuera también el que se comió el jamón colgado del techo. Me daba pena el hombre porque decía tal que así: "Lo quiero más que a mi vida pero al final no voy a poder seguir con él porque no puedo controlarlo". Hablamos de un animal de 70 kilos, con una fuerza descomunal.  Me dio una lástima el hombre!

Mi Lolilla sólo pesa cinco kilos, como un bebé.  Pero tiene fuerza suficiente para haber destrozado en una semana tres collares y un bozal educativo. He ido tapando todos los sitios conflictivos de la casa; he tapado el cañizo de la terraza que se comía con una tela metálica; he quitado de en medio revistas, paquetes de klínex, libros, pinzas de la ropa y cualquier cosa atractiva para ella;  he puesto fundas a presión en sus camitas y en el sofá... pero no puedo quitar los cables, no puedo arrancar las puertas, no puedo convertir mi piso en una casa de campo... Por mucho que haga siempre encontrará algo que destrozar.

A veces pienso que igual estoy siendo egoísta intentando convertir en perfecta perra urbanita a mi Lolilla cuando lo que ella querría para ser feliz sería corretear libre por el campo. Y cada día tengo más dudas al respecto. Puede que esté convirtiendo esto en una guerra sin cuartel que tendría fácil solución: buscarle un lugar para vivir en el que ella se sintiera feliz.

Tal vez ése sea el inevitable final de esta historia.

jueves, 20 de abril de 2017

Panegírico a mi novio (Continuación)

Abro otro post con la respuesta que he dado a unas lectoras en el anterior. La verdad es que me he pegado tal tute de escribir que creo que merece la pena dedicarle su propio espacio.

A ver, chicas, y os contesto grupalmente porque no dispongo de tanto tiempo, voy a intentar sacaros de vuestra zona de confort mental en la que se ve que os sentís seguras sin plantearos según qué cosas. No sé si es una buena idea porque alguna gente se emparanoia mucho cuando la sacas de ese espacio de seguridad pero creo que es inevitable.

Vosotras estáis hablando todo el tiempo de sexo y yo hablo de otra cosa, estoy en otro nivel. Mucho antes de que yo fuera la novia de mi novio él ya estaba enamorado de mí. Me leía y pensaba en mí, soñaba conmigo y fantaseaba conmigo. Se acostaba cada noche al lado de su señora y pensaba en mí. Aunque yo le hubiera dicho que solo podíamos ser amigos él seguiría enamorado de mí y siendo "infiel" con el pensamiento y con los sentimientos constantemente.

Tengo amigos que me han confesado que a veces fantasean conmigo, o que se sienten atraídos hacia mí. No he tenido nada con ellos, no me han puesto un dedo encima, pero son infieles a sus mujeres cuando follan con ellas pensando en mí. Y quien dice en mí dice en la vecina de arriba o en la compañera de trabajo o en la enfermera que les curó la herida ayer que enseñaba un poco el escote y eso les puso palotes. O en el enfermero, que también hay quien fantasea con otras cosas.

Lo que quiero decir es que lo de follar es lo de menos, de hecho mi novio y yo follamos muy poco porque no tenemos mucho tiempo para hacerlo tranquilamente y a mí nunca me ha gustado el aquí te pillo ni las prisas. Las más de las veces viene solo a verme, a charlar o a darme un beso, algo totalmente inocente. Pero eso ni siquiera es lo peor, lo peor es que piensa en mí a todas horas, cuando trabaja, cuando folla, cuando caga, cuando come, cuando pasea del brazo de su mujer...

Y sabéis por qué? Pues porque podéis reprimir y controlar el cuerpo todo lo que queráis pero el pensamiento afortunadamente es libre. Y los sentimientos también. Y tu marido puede no haberte puesto los cuernos físicamente en la vida y serte totalmente fiel pero tú no sabes si cada noche cuando se acuesta a tu lado está soñando con la enfermera o con el frutero o con tu mejor amiga. Y tampoco sabes en quién o en qué está pensando cuando folla contigo. Esa es la clave de que pueda existir parejas de larga duración, no plantearse mucho estas cosas porque ni una sola pareja saldría intacta de la prueba.



Ésa es la cuestión, que la monogamia es una convención forzada y antinatura; puede que la gente en la práctica no folle más que con su pareja, pero esa convención jamás podrá conseguir que no se desee a otras personas, que no nos enamoremos de otras personas, que nos acostemos junto a una pensando en otra, que follemos con nuestra pareja pensando o deseando hacerlo con otra persona...

El pensamiento y los deseos no están bajo control, son libres. Y si esa idea os angustia mejor que no tengáis pareja porque nunca podréis controlar su mente ni sus sentimientos. Todo lo más que conseguiréis es que no los lleve a la práctica y que se queden en simples deseos, vale, pero nada más. 


Yo no creo que mi novio sea más infiel ahora que cuando me deseaba secretamente sin habermew puesto una mano encima. Desde mi punto de vista era igual de infiel pero él no podía hacer nada para evitarlo, simplemente se había enamorado, y eso ocurre independientemente de nuestra voluntad.

Así que por muy en plan inquisitorial que os pongáis (que os ponéis efectivamente) y por muchas piedras que nos echéis a él y a mí, sencillamente estamos por encima de lapidaciones porque ha pasado algo completamente natural: que los sentimientos se han disparado y ha surgido el amor. Y lo estamos viviendo porque para mí lo que sería un crimen es no vivirlo. Un crimen muy grave porque estaríamos yendo en contra de nosotros mismos.

Todo esto no tiene nada que ver con su señora. Puede incluso que ella también desee a otros hombres o a otras mujeres, quién sabe. Su pensamiento y sus emociones también son libres. Y si eso ocurriera estoy segura, porque además lo hemos hablado, de que a él le gustaría que ella lo llevara a la práctica y fuera feliz.

Y por supuesto no hay que destrozar toda una familia por estas cosas. Por qué esos niños se tienen que ver privados de la convivencia familiar solo porque sus padres quieran o deseen a otras personas?

Ah, Alicia, gracias por el capote durante mi ausencia. Me alegro de que haya por aquí alguien, aparte de mí, con cierta capacidad de análisis fuera del pensamiento convencional y de prejuicios lapidatorios.

miércoles, 19 de abril de 2017

Panegírico a mi novio

Hoy quiero escribir un post en homenaje a mi novio. Como nadie lo conoce ni puede identificarlo es algo que le compromete poco pero de lo que yo necesito hablar.

Sé que hay gente que no entiende nuestra relación, pero si le conocieran a él seguro que lo entenderían porque es una persona totalmente especial. Probablemente única. Al menos yo nunca me he topado con nadie así.

Mi novio nunca conoció otra mujer que no fuera la suya propia. La conoció muy joven, con ella se casó, y con ella ha creado una familia. Siempre habla de ella bien, dice que es una bellísima persona. Eso me gusta mucho de él porque no soporto a los tíos que hablan mal de sus mujeres ni a las mujeres que hablan mal de sus maridos. Simplemente si no te gusta cómo es déjalo y punto.

Mi novio nunca le ha sido infiel a su mujer, y afirma convencido que nunca lo habría sido si yo no hubiera aparecido en su camino en forma de loca escritora virtual. No tenía necesidad, es muy feliz, la quiere mucho, no estaba falto de sexo ni de cariño ni de comprensión. Simplemente un día empezó a leerme, primero en la página de cine donde escribo y luego se pasó al blog. Él no buscaba a nadie, no tenía esa idea en la cabeza, solo pasó. Ya lo dijo Fito Páez: yo no buscaba a nadie y te vi.

Yo no me siento culpable en absoluto por ser la mujer que lo llevó a la infidelidad conyugal. Creo que todas las personas merecen la oportunidad de volver a enamorarse alguna vez en su vida en la madurez, cuando ya hace tanto tiempo que dejaron de tener esas sensaciones que ni recuerdan cómo eran. Y más que nadie se lo merece él, por ser como es.

Nosotros sabemos que no vamos a hacer ningún daño a nadie y que simplemente estamos viviendo algo que no podíamos dejar escapar. Yo no le quito nada a nadie; lo mío es compartir, no competir. Creo que cada cual tiene su papel en esta historia, y el mío es el que es y no quiero que sea otro.

Mi novio primero se enamoró de mí por dentro, se enganchó de mí como escritora (de hecho soy su escritora favorita, al menos eso dice, y yo le creo), y luego ya cuando me vio se enamoró también del resto. Pero más que enamorarse lo que hizo fue incorporar mi cara y mi cuerpo a esa persona de la que se había enamorado previamente. Eso nunca me había pasado antes, que alguien se enamorara primero de mi alma y después de mi cuerpo. El proceso natural siempre es al revés, aunque ahora con esto de la red creo que es algo que le pasa a mucha gente.

A mí él al principio no me gustaba mucho, la verdad. Me parecía una persona agradable, divertida, con muchos gustos en común conmigo (cine, música, frikadas varias...) pero no me sentía atraída. No porque estuviera casado, que eso siempre me ha dado igual, sino porque, como dicen en el First, no sentía ese feeling...

A veces cuando la gente que va al First dice eso pienso en el grave error que cometen. Lo del amor a primera vista está muy bien, si es que existe, pero ese feeling que dicen ellos muchas veces surge cuando vas conociendo a la otra persona y despacito, muy poquito a poco, te vas enamorando. Así es como me ha pasado a mí, muy poco a poco, casi sin enterarme. Y le di esa oportunidad porque me lo pasaba muy bien con él y no quería renunciar a eso. El tiempo ha venido a demostrarme que hice muy requetebien porque habría sido terrible perderme a alguien como él.

A alguien que se preocupa por mí todo el tiempo. Que me ayuda a hacer mi declaración de la renta,  que vive todo lo mío como suyo, que se traga todos los programas de perritos porque ha asimilado que mis perrillas también son suyas, que ve la tele conmigo aunque estemos a muchos kilómetros de distancia, que me abre los tarros que no puedo abrir, que le echa un vistazo a mi bici cuando le digo que le pasa algo raro, que viene a veces, muchas veces, más de cuatro veces, solo para verme un rato y charlar. O para pasear a las nenas conmigo. O para cenar juntos. Incluso solo para darme un beso e irse.

También hay sexo, por supuesto, y cuando lo hay es justamente el sexo que a mí me gusta, aunque no es lo prioritario ni para él ni para mí. Pero es que encima es buen amante, puede que el mejor amante que haya tenido nunca. Porque sabe lo que quiero, me intuye, me lee el pensamiento.  Y eso es taaaaannnnnnnn difícil conmigo!

Si hubiera podido elegir un novio a la carta sin duda sería él.  O alguien exactamente igual a él.

Ya lo conté una vez, nuestros DNIs son iguales, solo cambia el orden de los tres números finales. Solo hay tres personas en este país que tengamos ese DNI con los dígitos cambiados, ya que uno de ellos se repite. Y la posibilidad de haberme encontrado justo con una de esas personas era de una entre 999 millones como mucho. Pero ha ocurrido y eso me parece que contribuye a crear esa atmósfera mágica que rodea a todo lo nuestro.

No sé lo que durará ni ahora mismo me importa. Sé que cuando tenga que terminar terminará y lo aceptaremos y esto pasará a formar parte de nuestros recuerdos, de los mejores recuerdos de nuestra vida.

No sé si es el hombre de mi vida pero sí sé que es el de mis sueños.

Un ejemplo: alguien que sabe todo lo que estoy pasando con las perrillas y viene a casa y se sienta en la terraza conmigo y dice: "Coge tú a una perra y yo cojo a la otra, que las vamos a tranquilizar". Y uno enfrente del otro nos miramos mientras tenemos cada uno a una perrilla en el regazo totalmente relajadas. Y charlamos de nuestras cosas mientras las nenas casi se duermen. No puede haber un momento más perfecto en este mundo.

Y si eso no es amor... lo que quiera que sea es lo que yo simplemente soñé.

domingo, 16 de abril de 2017

La mala educación

Leo en El País Semanal el último artículo de Javier Marías, titulado "Estupidez clasista" y no puedo evitar darle en buena parte la razón, mal que me pese.

La columna va sobre la creciente mala educación y falta de modales que se ve en las intervenciones parlamentarias y sobre esa tendencia absurda de algunos partidos, concretamente Unidos Podemos, a llevar a las Cortes lo que ellos llaman "el lenguaje de la gente", entendiendo por "lenguaje de la gente" expresiones como "me la pela, me la refanfinfla, me la suda", y cosas así.

Copio un fragmento del artículo:

¿Acaso piensan que la gente carece de la capacidad de cambiar de registro según el lugar, la oportunidad y los interlocutores? Tampoco “el pueblo llano” habla de una sola manera, ni es tan lerdo como para no entender expresiones como “me trae sin cuidado” o “me resulta indiferente”, que son las que probablemente habría pronunciado la gran mayoría, de haberse encontrado en el Congreso (...) Todos somos capaces de instalarnos en lo grueso, nada más fácil, está al alcance de cualquiera, lo mismo que mostrarse cortés y respetuoso. Ninguna de las dos opciones tiene mérito alguno. Ahora bien, elegir la primera con pretextos “ideológicos”, con ánimo de “provocar”, en una época en que en todas las televisiones se oyen zafiedades sin pausa –se han convertido en la norma–, es, en el mejor de los casos, de una puerilidad sonrojante. En el peor, de una estupidez supina, y además clasista.

Y digo que no tengo más remedio que darle la razón, mal que me pese, porque yo voté a esta gente pero cada día que pasa me siento más alejada de su fondo, y también de sus formas.

Qué es para éstos hablar "el lenguaje de la gente"? Hablar el lenguaje de Belén Esteban, por ejemplo, que efectivamente es una tía que habla todo el tiempo a base de zafiedades y ordinarieces? Ésa es la gente a la que dicen representar? Así es como piensan que hablamos los denominados  "la gente"? Ése es el concepto que tienen de nosotros?

Porque yo, que soy gente, no me siento en absoluto identificada con ese lenguaje soez que, efectivamente, como muy bien dice Marías, puede usarse en un momento dado entre amigos, o en determinados contextos, pero desde luego nunca en una conferencia o en un acto público o entre personas desconocidas, mucho menos en un lugar políticamente sagrado en el que están nuestros representantes públicos democráticamente elegidos.

Yo quiero un respeto, quiero unas formas, quiero una educación; no quiero que mis representantes hablen como Belén Esteban o como si estuvieran en el debate de Gran Hermano. Eso a mí NO ME REPRESENTA. Y si lo que pretenden es adularme y seducirme usando mi supuesto lenguaje, lo que hacen en realidad es insultarme. Tal vez no ofenderme porque no pueden, pero sí están insultando gravemente a mi inteligencia.

Yo he votado unas ideas, sí, pero también una forma de hacer política que está totalmente reñida con ese tono burdo, faltón y rufianesco (y nunca mejor dicho, por ser el diputado de ERC Rufián uno de los más emblemáticos ejemplares de ese modo de expresarse en el Parlamento).

Yo he votado para que se trabaje por unas determinadas políticas (por cierto, veo muy poco curro en ese sentido), para que se hagan preguntas incómodas y comprometidas en las sesiones de control, para que se haga una oposición fuerte a un gobierno de derechas en minoría, pero no para que la gente a la que he votado me saque los colores por expresarse en un lugar como el Parlamento como si estuvieran en una taberna de Magaluf hartos de cubatas o como si fueran hinchas del Leicester.

Para quien quiera leer el artículo entero ahí va:

http://elpaissemanal.elpais.com/columna/javier-marias-estupidez-clasista/



Nenas versus nenes: balance final

- Mamáaaaaaa, mira éstaaaaaaaa!

Mi hijo llamándome a gritos porque Bimba le ladra.

Así toda la Semana Santa. Éste ha sido mi planazo, amigos. Una guerra sin cuartel entre los nenes y las nenas, de la que no he querido dejar constancia escrita hasta no haber terminado del todo por aquello de que el desenlace nunca se sabe hasta que no se ha puesto definitivamente el punto final.

Sabéis que estaba ilusionadísima estas vacaciones con mi primera experiencia de convivencia familiar desde que las nenas llegaron a casa. He trabajado arduamente para ello intentando adiestrarlas para que fueran unas chicas de pro y mis niños al llegar hicieran buenas migas con ellas y se enamoraran todos mutuamente a primera vista.  Pobre ilusa!

También había hecho coincidir este primer encuentro con la cirugía de esterilización de las perrillas, ya que podría dedicarles más tiempo al estar de vacaciones y presuponía yo que con la convalescencia estarían más tranquilas y receptivas a los cariñitos de mi prole. Sí sí sí, receptivas, pobre desgraciá!

Craso error el mío, entre miles de crasos errores. Me he pasado todas las vacaciones en una especie de montaña rusa emocional, de carrusel bipolar. A ratos supercontenta con mis pequeños grandes avances de adiestramiento, a ratos hundida en la más absoluta miseria por mis fracasos. De la esperanza a la desesperanza más absoluta, de la hipermotivación a la desmotivación total.

Desesperada, desmotivada, insegura, destrozada de los nervios, tensa, deprimida... y de repente feliz, ilusionada, fuerte, poderosa, determinada a conseguirlo, segurísima de mí misma... Un subeybaja, unos vaivenes emocionales, un sindiós... que así estoy ahora mismo cuando todo ha terminado y cada mochuelo ha vuelto a su olivo, como si me hubieran dado siete palizas a bastonazos.

Cada avance significaba 15 pasos atrás. Cada momento de felicidad, cada victoria, un montón de derrotas posteriores. He reído, he llorado, he sufrido, me he cabreado, he flotado en una nube, he bajado a los infiernos... por todos los estados de ánimo he pasado. Para que luego digan que para sentirse viva hay que hincharse a viajar o tirarse en parapente.

Intentaré contarlo por partes, puesto que había varios planes y estrategias de actuación y los resultados han sido muy dispares:

1. Clases prácticas de "Asentamiento canino en bareto".

Se trataba de conseguir que las nenas pudieran estar más o menos sociables en un entorno hostelero tipical spanish, terracita de verano monda y lironda, nada del otro mundo. En esto a ratos he triunfado, a ratos me ha ido como el culo.

Hubo un momento mágico en el que incluso conseguí, con mucho esfuerzo, eso sí, que Lola estuviera sentada y relativamente tranquila, sin tirar de la correa, con una paloma a menos de un metro caminando tranquilamente. Al principio se la quería comer viva, pero después de un tratamiento intensivo de tirones y toques... siiiiiiiiiií, se quedó quieta y la paloma hasta se permitió cierto chuleo en sus narices.

Esto tuvo que ser durísimo para una depredadora nata como ella, por eso ese día me sentí muuuuuuy orgullosa de ella y de mí, por haberlo trabajado juntas. Pero vamos, tardé muy poco en venirme abajo de nuevo, no me acuerdo por qué exactamente.

A día de hoy he conseguido que se queden más o menos quietas un cuarto de hora en un bar, pasen perros, palomas, ranas, ratas, gatos o musarañas. Las mantengo separadas, eso sí, porque si Lola ataca Bimba se contagia, y ella no tiene esa naturaleza depredadora, así que es mejor tener a cada una a un lado de mi silla y controlarlas por separado.

Por supuesto les dedico mi atención exclusiva, aún no he probado a sentarme con alguien, charlar y pasar de ellas. Probablemente cuando lo haga me llevaré otro chasco.

2. Proyecto "Celos de Bimba".

Esto es lo que está siendo más duro, y además todos los demás progresos solo consiguen exacerbar el instinto dependiente y posesivo de Bimba.

Cualquier cosa que yo haga con Lola es un problema. No soporta que la mire, ni que la toque, ni siquiera que le riña. No soporta que le preste la menor atención. Ponerle la correa a Lola delante de Bimba es un imposible porque se sube encima, llora, ladra... el final ha sido atarla a la mesa para poder hacerlo tranquilamente.

Si salimos de paseo las tres juntas Bimba está totalmente pendiente de si yo miro a Lola, toco a Lola, riño a Lola, le hablo a Lola, le doy un premio a Lola. Y Lola mientras pasa de Bimba y de mí y está solo pendiente de olisquear el suelo, cazar palomas y comerse to lo que pilla. Es una relación tan desigual que una piensa que al final solo puede derivar en desastre.  Esto mismo en una relación de pareja terminaría saliendo en la sección de sucesos de los telediarios fijo.

3. Proyecto "Tirones de Lola".

 Aquí he fracasado radicalmente, al menos de momento. Intenté seguir los consejos de la amiga Alicia en el blog pero Lola pasa total, colaboración cero.

He probado tus consejos, Alicia, con toda la paciencia del mundo. He probado también a ponerle la correa con nudo corredizo, tipo Borja Capponi, a ver si sintiéndose más apretada dejaba de tironear. Nada, se ahoga, tose, jadea... pero tira igual, como si no pudiera hacer otra cosa, como si le fuera la vida en ello.

Lo último que he probado ha sido marearla, la técnica de llevarla en distintas direcciones cuando tire de la correa. Pero al final termino yo como un pato mareao, no sé ni para dónde voy, y ella tan fresca, por supuesto sigue tironeando tan pancha y le importa un huevo no poder casi respirar por ahorcamiento.

En este proyecto concretamente estoy a punto de rendirme porque no creo que sea capaz. Solo me consuela saber que existen artilugios varios, como el que me recomendó la amiga Yo, que por lo visto disuaden de tirar de la correa con más efectividad que mis técnicas. Ya me he tirado al barro y estoy mirando en Internet el artefacto más efectivo. Entre otras cosas porque es que se va a ahorcar y a ella le da igual, es una perra suicida. Entre morir ahorcada y no tirar de la correa prefiere morir, está claro.

4. Plan estratégico "Ladridos no".

Bimba es una perra asustadiza, vive acojonada, supongo que por eso está tan aferrada a mí y tiene esa dependencia y esos celos de todo lo que se me acerque. Sospecho que ha sido una perra maltratada porque si no es inexplicable su comportamiento. Tiene desde el primer día unos ataques de ansiedad tremendos cuando me separo de ella, es realmente angustioso. Nunca he soportado a los tíos celosos y posesivos, y ahora va y me toca una perra así, manda huevos!

La forma de Bimba de manifestar que está acojonada es expresarse a ladrido pelao. Ladra constantemente cuando  llega alguien que no conoce, y por supuesto estos días ha cantado la Traviata al aparecer mis hijos por casa.

Es curioso, porque todo lo que he aprendido viendo los programas del "Malaspulgas" de Borja Cappone ha resultado de puta madre. Cuando yo estoy presente controlo perfectamente los ladridos de Bimba. La sujeto con la correa, le doy toquecitos, le pego tirones... y vale, perfecto, no ladra.

Pero luego yo me voy y alguno de los niños entra en su espacio y se vuelve to loca. Puede ladrar una hora seguida tranquilamente, y todo el día si se pone. Y claro, yo no puedo estar ahí todo el tiempo en plan segurata, también necesito moverme.

Los niños no querían saber nada de ella, la consideraban una perra antipática, asocial y coñazo. A ellos les gusta Lola, que es divertida, juguetona y pizpireta. Y lo entiendo, una perra que no para de ladrarte y gruñirte todo el rato es un puto incordio. Quién coño quiere tratar con un bicho así? Mi hijo el mayor incluso me dijo que la llevara de vuelta a la perrera y que no se me ocurriera ir nunca a su casa con ella. Esto me hundió en la miseria más absoluta porque me moría de pena por ella.

Mi depresión iba en aumento. Mi hijo el pequeño me gritaba esa frase con la que empieza este post:

- Mamaaaaaaaá, mira éstaaaaaaaa!!

Como cuando de chicos se hostiaban vivos entre ellos, y cuando alguno salía perjudicado me llamaba a grito pelao para poner orden.

El mayor, que es mucho más animalero, lo intentó con Bimba de varias maneras, incluso con sobornos, pero tuvo escaso éxito. Sí, ella agarraba su chuche y se la llevaba... pero luego le gruñía y le ladraba igual.

Duele decirlo porque no es mi solución preferida pero él ha sido más expeditivo por su cuenta. En uno de los ataques de Bimba agarró un Pronto enrollado que yo tengo para asustarlas en situaciones extremas y le arreó en el lomo. Mano de santo, no ha vuelto a ladrar en su presencia, y ahora hasta le lame la mano y le encanta estar con él. El Pronto, siempre lo he dicho, es una revista superpráctica, con una relación calidad-precio incomparable. Ahora con una utilidad más que añadir a las muchas que ya tenía.

Los designios del señor son inescrutables. Un prontazo en el lomo vendría a ser el equivalente perruno al cachete en el culo a los niños de toda la vida de Dios! Por cierto, del que yo soy totalmente partidaria. Un toque mágico y definitivo. De hecho Bimba desde entonces ha cambiado por completo su actitud y creo que algo parecido al amor está surgiendo entre ellos.

5.  Estudio analítico "Quién domina a quién".

Durante un tiempo creí que Lola era la perra dominante; estaba convencida. Después, durante estas vacaciones llegué a creer que no, que era Bimba, tal era la forma en la que se abalanzaba hacia Lola cuando se me acercaba. Ahora he cambiado de opinión y ya definitivamente sé que aquí la que parte el bacalao es la Lolilla.

Os cuento: un día nos encontramos con un vecino que llevaba un hueso de jamón en la mano, para tirarlo supongo. Las nenas se liaron a chupar la pata como locas (recordad que solo les doy de comer pienso puro y duro, así que os podéis imaginar el entusiasmo). Tenía toda la pinta de ser pata negra, hasta a mí me daban ganas de pegarle un lametón. Pero en un momento dado hubo un rifirrafe entre ellas, Lola sacó los dientes y Bimba se acojonó viva y se retiró detrás de mí, y ya mientras yo charlaba con el vecino se quedó Lola toda la pata para ella. Y vive dios que sacó provecho. No paró de chupetear y de arrancar cachos de lo que quedaba de jamón. Qué vicio la hijaputa, hossstia! Y qué envidia! Quién fuera perro!

Después de eso ya he tenido pocas dudas. Con los nenes en casa Bimba se pasa la vida o ladrando de puro acojone o escondida debajo de mi silla o a mis pies en el sofá. Es imposible que una perra con tanto miedo sea dominante sobre una cazadora vivalavirgen como Lola. Definitivamente aquí la que parte el bacalao es doña Dolores Martínez de Todos los Santos.

Lo que pasa es que como es tan pasota y tan chulilla tampoco la domina mucho. Como que la deja vivir. La Lolilla no es pendenciera, le gusta cazar, pero luego yo juraría que es una verdadera bon vivant, una sibarita, no está por los malos rollos, le gusta disfrutar.

Por ejemplo, yo les pongo la comida a las dos en el mismo cuenco y nunca se han peleado por comer. Se acercan al unísono y cada cual se lleva su botín a un rincón y allí se lo come. Es verdad que comen cada una por su lado pero no tienen problema en coger del mismo recipiente. Ni siquiera se pelean por ser la primera en acercarse, van juntas siempre. Por eso aunque he leído que es mejor ponerles de comer por separado, como he visto que eso no es problema para ellas y que incluso comparten gustosamente el pienso, no pienso (pese a la redundancia) separarlas.

Bueno, amigos, y éste es el balance final de estas vacaciones en las que he currado, sufrido, reído, llorado y me he  agotado mucho más que en ninguna semana laboral que sea capaz de recordar. Ahora necesitaría otra semana por lo menos para recuperarme de este estrés, esta tensión, y este currelo que me he pegado, encima por amor al arte.

Ya véis que el resultado es difícil de calificar. Ni he triunfado por completo, ni tampoco he fracasado total como he llegado a pensar en los momentos más duros. Ha sido mi semana de pasión, mi via crucis particular, pero tampoco he salido tan mal parada.

Joer, que mi Lolilla se ha sentado en un bar con una paloma chuleándole al lado; y que mi Bimba ya no le ladra a mi Juanillo y hasta le lame la mano y creo que han empezado a gustarse; y que me puedo tomar una cerveza en un bar con ellas juntas sin que toda la gente termine mirándonos y queriéndonos asesinar.

Tampoco ha estado tan mal, no?

No es perfecto, mas se acerca a lo que yo... simplemente soñé.

Ps. Ahora lo que me preocupa es cómo van a llevar la vuelta a la rutina, después de haber estado todos estos días con la casa llena de gente y con lo que les ha costado acostumbrarse... ahora otra vez solas el 75% del tiempo. No sé, igual se han quedado descansando.

jueves, 13 de abril de 2017

Los problemas crecen

Bueno, amigos, tras la demostración cuasi académica de conocimientos caninos que he hecho en mi post anterior ahora continúo con mis aventuras y desventuras, mis lentos progresos y mi descenso a los infiernos.

En el último capítulo creo que nos habíamos quedado en que la problemática era Lola por ser una perra de caza poco habituada a la vida en sociedad. Bueno, pues no, ahora la situación ha cambiado radicalmente.

Estos días han aparecido mis hijos en casa por primera vez desde que ellas están conmigo y de esta manera se ha revelado la auténtica naturaleza de las perrillas. Y he descubierto... tachán tachán tachán... que la verdaderamente problemática es Bimba. Concretamente los celos de Bimba y su sentimiento de posesión hacia mí.

Bimba cree... no que ella es mía, sino que yo soy suya. De verdad, es una perra genial, cuando no está Lola ni están los niños. Yo la saco de paseo y es la mascota perfecta. Camina a mi lado, si vemos a otros perrillos se relaciona con ellos, si me siento en un bar se sienta a mis pies y no abre la boca...

Por todo esto yo creía que cuando venía Lola la que la ponía nerviosa era ella. Sin embargo ahora me he percatado de que no es Lola la que con su actitud contagia a Bimba sino que es ésta la que siente unos celos terribles y está todo el rato pendiente de la otra, en tensión y dispuesta a atacar a quien sea. Es ella el verdadero problema.

Y lo he descubierto cuando han llegado los niños a casa y de repente Bimba ha sacado los dientes, ha empezado a ladrar como una loca e incluso ha mordido a uno de ellos. Por no hablar de gruñidos constantes, actitudes claramente posesivas hacia mí y agresivas hacia ellos y otras cosas que me han llenado de espanto.

Estaba totalmente equivocada con respecto a ellas. Yo pensaba que la perra dominante era Lola, y era falso. Pensaba que era la asocial, y era falso. A Lola le encanta la gente, que la toquen, que le den juego, aunque le den un poco de miedo los otros perros.

Recuerdo que el día que las recogí de la perrera me pusieron a Bimba encima, chorreando por la lluvia y muerta de frío, y el animal no hacía más que tiritar y refugiarse en mi regazo, con un ataque de ansiedad tremendo. Bueno, pues esa ansiedad la sigue teniendo y ahora multiplicada por mil.

Entonces se aferró a mí como un clavo ardiendo pero es que esa reacción inicial perfectamente comprensible se ha convertido en una dependencia total, con la consiguiente angustia que eso genera. Cuando yo no estoy ella sufre, cuando llega alguien desconocido ella sufre, cuando acaricio a Lola ella sufre... Bimba está sufriendo constantemente y en realidad solo está tranquila cuando salgo con ella sola de paseo o cuando estamos juntas y no se nos acerca Lola.

Y alguno dirá: y con todo lo que dices que has aprendido de etología canina cómo es que no sabes afrontar esto?

Pues porque de todas las cosas que puse en el post anterior que había aprendido ninguna me sirve para este problema.

Que yo soy la líder de la manada ella lo tiene claro; que ella no es una persona sino un animal yo también lo tengo claro; que no la premio ni la acaricio cuando está ansiosa o agresiva lo mismo; que ella sale por la puerta detrás de mí eso seguro; que cuando gruñe o hace algo que no me gusta le doy toques todo el rato también... pero eso no le quita esa angustia que siente y esos celos. Eso no tengo ni puta idea de cómo solucionarlo.

Que ladre, gruña y hasta muerda a mis hijos es un problema gordo. Todos los demás avances que he conseguido con ellas, que son muchos, se quedan en nada si mis hijos no pueden estar tranquilos en casa. Ya me gustaría a mí que Borja Capponi tuviera un remedio para esto.

Esta perra está acojonada por lo que sea que haya ocurrido en su pasado, por el abandono o por vete tú a saber, y yo me he convertido en su salvación. Y no está dispuesta a soltar esa tabla ni a dejar que nadie más se agarre. Me recuerda un poco al hundimiento del Titanic, a aquéllos que consiguieron subirse  a un bote y remaban a toda leche para que los desesperados que se estaban ahogando no se subieran y hundieran la barca.

Lo que tengo claro es que un animal asustado es un animal peligroso.

Hoy me ha dicho mi hijo una cosa que me ha aterrado: "esa perra es una mierda, la deberías de llevar de vuelta a la perrera".

Simplemente la frase me ha paralizado. Porque yo en ningún momento me he planteado esa opción mientras he estado sola con ellas, pero si en un momento dado la perra agrede a mis hijos y tengo que elegir, la cosa está clara.

Y eso sencillamente me aterra.

Malas pulgas

Hola amigos. Estaréis ardiendo en deseos, en un sinvivir, mordiéndoos las uñas to desesperaos por saber cómo me está yendo estas vacaciones con las supernenas. Pos vale, no os voy a hacer sufrir más, os cuento.

Ayer llevé a las chicas a operarlas para esterilizarlas. Tendríais que verlas, son unas campeonas las tías. Les quitaron el útero y los ovarios, que ahí es nada, y tienen unos costurones que dan miedo. Y están como rosas las cabronas!!! Vinieron caminando desde la clínica, y aunque anoche lucían pelín mustias (sobre todo la Lolilla) esta mañana estaban como si nada. Nunca dejaré de asombrarme de la capacidad de aguante de los animales.

Últimamente estoy aprendiendo un montón de cosas. Me estoy empapando de etología perruna tragándome a destajo vídeos del programa "Malas pulgas",  que recomiendo a todo el mundo que quiera saber del tema porque es bastante ilustrativo, a pesar de que Borja, el adiestrador, me cae un pelín gordo, la verdad. Es que ya hasta el pijinombre echa para atrás.

Pero bueno, quiero dejar constancia de unas cuantas cosas básicas que he aprendido y que me gustaría compartir con mis escasos pero fieles seguidores.

1. Los perros no son personas, nada de andropomorfizarlos. Sobre todo esto ocurre con los perros pequeños, que a menudo los tomamos por bebés. A mí me pasó con el Manolo, que lo cogí cachorro y lo convertí en mi niño chico. Y así me tenía el cabroncete, en la palma de la mano; hacía conmigo lo que quería.  Era el puto amo, y lo sabía.  No, amigos, con él lo hice mal. Sé que fue un perrito feliz pero yo no fui una buena ama y aunque sea a posteriori tengo que reconocerlo. No me molesté en dedicarle tiempo para educarlo y siempre lo traté como a una persona y no como lo que era, un perro. Muy mal por mi parte,  aunque tarde entono el mea culpa. Con las nenas no pienso cometer el mismo error. Aunque las llame nenas, tranquilos, que sé lo que son.

2. El macho alfa de la manada eres tú, nunca pueden ser ellos. Ése fue mi principal error con el Manolo. Ellos son perros y el lenguaje que entienden es que hay alguien que manda y alguien que obedece, y si tú no sabes mandar ellos se ven en la obligación de hacerlo por ti. Les estás echando encima una responsabilidad que no les corresponde porque quien debería dirigir el cotarro eres tú, que para eso has tomado la decisión de adoptarlos. Por tanto, dejar claro desde el principio quién manda es importantísimo; de hecho es lo fundamental.

3. Siempre salir de casa antes, ellos detrás. Muy importante para que ellos sepan que el paseo lo dominas tú. Esto es consecuencia del punto anterior. Si tú eres el amo, vas delante siempre, y por supuesto, diriges la manada. Esto es bastante fácil, sólo tienes que adelantarte tú y no dejarlos pasar el umbral de la puerta hasta que les des permiso. Ojalá todo fuera igual de sencillo.

4. Toques permanentes. Sea cual sea el problema que tengas con tu perro la solución pasa por darle toques de atención que lo distraigan. Si es agresivo con otros perros... toques. Si olisquea el suelo... toques. Si tira de la correa... toques. Si ladra... toques. Los toques hacen que momentáneamente se despiste y deje de hacer aquello que no quieres que haga. Hay que darle como pequeñas mordidas humanas, lo que haría su madre pero simulándolo tú con la mano. Y si va caminando leves pataditas en el lomo. Como diciéndole: Ein? Y te pones todo lo pesado que haga falta porque para pesados, ellos, que van a insistir una y otra vez hasta hartarte. En eso son peores que los nenes chicos.

5. No acariciarlos nunca cuando están nerviosos. Esto tiene mucho que ver con la antropomorfización del animal. Si tú acaricias a un perro cuando está agresivo o nervioso o ansioso con la intención de tranquilizarlo el mensaje que le estás transmitiendo es: "me gusta que estés así y por eso te acaricio y te quiero". Él no entiende que lo que pretendes es tranquilizarlo, cree que le estás felicitando por su comportamiento. Los premios, las caricias y los mimitos se les dan cuando se estén portando bien, cuando están ya tranquilos. Es la forma de decirles: muy bien, chico, así me gusta.

Pues bien, todas estas cosas de etología canina básica y muchas más adicionales estoy aprendiendo yo con el "Malas pulgas".

Tengo que darle las gracias a mi novio, que fue quien empezó a chuparse programas a punta pala y que intentó insistentemente meterme el gusanillo, durante mucho tiempo en vano (uyssssss, qué raro ha sonado esto, no?).

Hasta que un buen día, movida por la desesperación, empecé a verlos. Y me enganché. Y ahora me he convertido en auténtica forofa, tanto o más que él.

Ah, y gracias también por ver los programas conmigo, aunque a distancia, para ir comentando las jugadas más interesantes. Por ser mi cómplice en esta aventura. No tiene precio compartir algo así con alguien que está tan entregado a la causa perruna como tú misma.

No sé en qué momento se me apareció el hada madrina que me trajo este novio, pero fue un gran golpe de suerte. La verdad es que sin su ayuda no sé si lo del Manolo y lo de las nenas lo habría llevado tan bien.

Desde aquí te lo digo: eres un pedazo de novio.

Y a las nenas: sois unas pedazo de perras, y estoy muy orgullosa de vosotras.

Hala, pos ya está dicho.

jueves, 6 de abril de 2017

Volviéndome to loca

Sí, bueno, ya sé que estoy un poco cansina con el tema perras, pero a ver, ahora mismo son mi principal preocupación y ocupan buena parte de mis pensamientos diarios, por no decir todos. Y lo bueno que tiene esto es que no es obligatorio leerlo, al que no le guste el tema yo ya he avisado de lo que va, que se dé media vuelta y se salga.

De todas formas he podido comprobar estos días que hay gente que pasa por aquí que se nota que sabe de etología perruna y yo necesito urgentemente ayuda, consuelo y comprensión. Y hasta un poco de conmiseración y caridad cristiana.

Lo estoy pasando regulín con lo de la socialización de las nenas. Y en gran parte es porque es muy complicado al no ser una sola, lo cual hace que las dificultades se multipliquen por 25. No es lo mismo educar en solitario a tener que hacerlo en modo grupal, o si no que se lo pregunten a los maestros. Y en el tema canino me parece que todavía es peor porque los animales parecen requerir atención exclusiva muchas veces. Para mí esto es como ser madre soltera primeriza, encima de mellizos o de gemelos.Así más o menos estoy.

Salir con ellas de paseo es un poema. Sí, es verdad que ya suben y bajan bien las escaleras, pero una vez llegamos a la calle empieza la fiesta.

Los primeros días usé una correa mútiple que sirve para llevar a varios perros porque era más cómodo para mí al quedarme una mano libre, pero enseguida me di cuenta de que era un sindiós total. Las nenas van cada una a su bola. Bimba se ve que ha sido perra de familia y que ha salido antes de paseo. Es educada y no tira mucho de la correa. Va todo el rato mirando a ver si yo voy al lado y es muy obediente. Pasear sola con ella sería una delicia seguro. Pero la otra es una loca perola, que en lugar de llamarse Lola ni Martínez debería de llamarse la Loca Martínez, porque está como una chota. Esa no pasea, esa sale de caza. Camina sin ton ni son ni dirección fija, ella va según huela o vea algo que se mueva, ya sea paloma, perro, mosca, papel volando o musaraña. Donde ve movimiento pallá que va ella pegando tirones de la correa como una posesa.

Naturalmente he tenido que optar por las correas separadas porque me estaba dislocando a la otra pobre, que es mucho más tranquila. Y ahora voy con una en cada mano, con las dificultades adicionales que os podéis imaginar, la primera que la que se está volviendo loca soy yo.

Me estoy volviendo yo tan chalada como ella porque no sé ni lo que hago, es una bipolaridad absoluta. Paseo con un brazo relajado y el otro en constante tensión, con la mitad del cuerpo tranquila y la otra pegando tirones. Procuro llevar a la rebelde sin causa con la derecha porque con la izquierda no tengo yo fuerza para tanto meneo.

Y ya no te cruces con otros perros porque ahí viene el lío del montepío. Yo sé cuál es el procedimiento si vas con un solo perrillo pero cómo voy a calmar a una leona si estoy agarrando a la otra con la otra mano y además también se pone nerviosa cuando nos cruzamos con perros? A cuál calmo, a cuál miro, me agacho o no me agacho? Y si me agacho qué hago?  Echarme a llorar? Porque lo que no puedo es soltar a una para reducir y controlar a la otra.

Loca pero loca loca loca loca loca loca.

(Inciso: habrá quien diga "pos sácalas por separado". Sí, claro, yo no tengo otra cosa que hacer al cabo del día que pasear perras individualmente, atención personalizada. Si alguien lo ha pensado le contesto: yo tengo el tiempo que tengo, no tengo más. Y con ese tiempo no me puedo permitir educación exclusiva para cada una, o vamos en comandita el trío lalalá o no hay ná que hacer).

Prosigo:

Luego viene el momento cerveza. Los cirios que me montan cuando me siento en un bar, lavirrrrgen! Imposible. No se están quietas ni un minuto, todo el rato quieren subirse encima de mí, venga a saltar y a lloriquear. Y como se acerque otro perro ya la tenemos liá. Tremendo pollo.

Alguien me hizo notar que era un grave error intentar sentarme a tomar algo si ellas no están acostumbradas a estar tranquilamente quietas en la calle. No puedo pretender que se comporten bien si no tienen costumbre de estar en bares. Es como los niños, si los sacas de higos a pepinos lo más probable es que te armen un pollo en un restaurante; pero si los llevas todas las semanas y los has educado para que se comporten bien sabrán hacerlo.

Totaaaaaaaaaal! Que he decidido que del paseo de una hora diaria voy a dedicar un cuarto de hora a hacer prácticas de "Cerveza con perras". Y ahí que me tenéis estoicamente sentada en una terraza con mi birra, intentando mantenerme relajada y sonriente mientras procuro que no se me suba ninguna, que no se me irriten, que no lloren, que no ladren, que no se abalancen a por los otros perros que pasan, que no se líen con las correas... En fin, os podéis hacer una idea de cómo me sienta a mí esa cerveza todos los días. Con cada una atada a un brazo de la silla y to bizca mirando con cada ojo a la perra correspondiente. Y dando manotazos para quitármelas de encima. Un día intenté hablar a la vez con mi hijo por teléfono y al final habían hecho un nudo marinero en la silla que tuvieron que ayudarme entre siete a deshacerlo.

Estoy loca loca loca pero muuuuuy loca.

Con lo bien que se portan en mi casa los fines de semana cuando me siento en la terraza con ellas! Se tumban al sol, se levantan tranquilamente, van para un lado y para otro, se vuelven a tumbar a mis pies, se meten en la casa, vuelven a salir... y yo ni me entero de que hay perras.

Y me digo: por quéeeeeeeeee? Por qué no pueden hacer igual en la calle?

Ya, ya lo sé. Hay tres factores que lo cambian todo en casa:

1. No están atadas.

2. No hay otros perros.

3. Es su hábitat cotidiano.

La calle no; en la calle hay enemigos perrunos por todas partes, y además están sujetas de la correa. Lo único que puedo conseguir es que el hábitat callejero les resulte más familiar sacándolas cada día y tomándome esa cerveza infernal con ellas.

En fin, un poema de verdad. Estoy como si me hubieran pegado siete palizas a garrotazo limpio. Es un agotamiento físico pero también mental, porque la mitad de las noches me despierto de madrugada y me pongo a dar vueltas a ideas peregrinas que se me ocurren sobre educación canina y me paso la noche en vela pensando en ellas, en cómo podría hacer esto o lo otro... Y en mi cabeza todo es perfecto y sale muy bien, pero cuando llega el momento de enfrentarme a la realidad y ponerlo en práctica  todo es un desastre y me vuelvo turulata.

Estos días de atrás que además ha hecho muchísimo aire era de verdad pa verme. Con una perra enganchá a cada mano, el pelo volando sin poder apartármelo de la cara, sin ver un carajo, el vestido que con el aire se me subía y tampoco me lo podía bajar, y hoy encima de un tirón de la Lola se me ha bajado también el escote y me he quedado con el sujetador al aire... Solo me faltaba que se me hubiera caído el moquillo. Diossss, ha habido un momento en el que no sé cómo no me he tirado al suelo y me he echado a llorar.

Siento daros la brasa pero es que necesito desahogarme un poco. De verdad no os doy mucha mucha mucha penilla?

martes, 4 de abril de 2017

Más etología canina

Últimamente me he puesto como una loca a mirar vídeos por Internet sobre adiestramiento perruno. Los que no sabéis del tema no os podéis hacer una idea de lo difícil que es esto. La verdad es que como no me había puesto nunca antes porque mi relación con el Manolo era de pasar olímpicamente el uno del otro, yo tampoco era consciente de la complejidad de la educación canina. Es que es un mundo, oye. De todas formas en mi caso la cuestión se complica aún más porque se trata de educar a una y a la otra, cada una de su padre y de su madre; si fuera una sola sería mucho más fácil.

En fin, con las perrillas ahí voy avanzando a trompicones. Algunas cosas las voy solventando, por ejemplo, lo de bajarlas del sofá. Eso está casi conseguido, aunque todavía de vez en cuando alguna se despista (Lolilla casi siempre) y aparece tan ricamente tumbada en la cheslong como quien no quiere la cosa, pero vamos, "me llena de odgullo y satisfadzión" decir que he podido comprobar que incluso cuando no estoy en casa respetan el trato y no se suben aprovechando mis ausencias. Algo es algo.

Ahora tengo otros retos. El más importante es socializarlas porque se ponen muy leonas cuando nos cruzamos con otros perros y a mí me gustaría que fueran unas perritas amables y buenas compañeras de paseo. Otra vez la peor es Lola, Bimba es mucho más tranquila. Tengo la impresión de que la Lola es una perra de parcela, que ha debido de pasar mucho tiempo sola en el campo cazando a la buena de Dios y defendiéndose de las alimañas como ha podido. Lo sospecho porque tiene un instinto cazador muy acusado, es depredadora total, y porque al principio le tenía mucho miedo a la presencia humana. Por eso ella es la que más problemas me está dando para todo.  Bimba aprende muy rápido las normas, lo que me hace pensar que además de ser una perrita muy noble y obediente casi seguro que ha vivido en una casa y ya tenía ciertos buenos hábitos perrunos antes de ir a parar a la perrera.

Ya quisiera yo saber cosas de Lola y de su pasado para así poder diagnosticar claramente el porqué de esa agresividad para con los otros perros. No sé si es instinto de agresión o de defensa. O si es para protegerme a mí o para protegerse ella.

De todas formas he llegado a la conclusión, después de ver muchos vídeos y leer muchas páginas de consejos, que lo mejor es empezar por el principio, o sea, que aprendan a obedecer órdenes básicas. Por ejemplo, ahora estoy intentando que se sienten cuando se lo mando. Y para ello me he puesto a ver vídeos donde enseñan a hacerlo y he intentado llevarlo a la práctica. El sistema es coger una chuche y ponérsela delante pero no dejar que la coja, luego vas reculando y alejándole la chuche y supuestamente llega un momento en el que se sientan ellos solos para conseguirla.

Y una mierdaaaaaaaaa!

Me tiré ayer media tarde con la puta chuche en la mano, poniéndosela en el hocico y reculando. Y lo único que conseguí es que se convirtieran en saltimbanquis circenses, que ya quisieran en cualquier circo de pro tener unos perros capaces de pegar esos saltos. Lolilla es una artista total, llega casi al techo y hasta da triples saltos mortales. Además he comprobado que la jodía puede estar cinco minutos seguidos a la pata coja, más tiesa que una estaca, si piensa que puede pillar cacho.

Saltar hasta el techo, caminar de pie... todo eso lo he conseguido sin problema. Vamos, que si algún día me falta el trabajo puedo ganarme perfectamente la vida con ellas haciendo espectáculos callejeros. Pero ni una sola vez he conseguido que pongan el culo en el suelo, ni una! O yo lo estoy haciendo mal o mis perras son distintas a los otros perros y no responden al adiestramiento canino normal.

Prometo que he seguido los pasos exactos que he visto en los vídeos,  he respetado escrupulosamente todas las recomendaciones, he impostado hasta la voz de los adiestradores... y nada. Esos culos no se acercan al suelo ni un milímetro.

Y digo yo: si soy incapaz de conseguir ni siquiera que se sienten cómo voy a conseguir que cuando se crucen con otro perro no se lo coman vivo las leonas estas?

Pero no me rindo, soy una tía de ideas fijas y lo que me propongo lo consigo, como si me fuera la vida en ello. Esas se sientan sí o sí, aunque sea lo último que haga en este mundo. A Dios pongo por testigo, yo antes de cerrar los ojos para siempre tengo que verlas con el culo pegado al suelo como que me llamo Inma.

No saben éstas con quién están tratando.

Querido cuerpo

Leo en El País Semanal una de esas cartas blancas que tanto me gustan. En esta ocasión es la escritora Luz Gabás, y su carta me ha parecido muy original porque la dedica a su cuerpo, a la relación que mantiene con él, y he pensado que es una idea estupenda esa de dialogar un poco con el propio cuerpo, así que allá voy yo también con mi carta:

Querido cuerpo:

La verdad es que no sé cómo todavía me hablas, con lo que te he maltratado. Hay que ver la mala vida que te he dado! Cómo te he puteado y qué poco te he cuidado!

Aún recuerdo cuando no te daba de comer aunque me lo pedías a gritos. Cuando te dejaba horas y horas y hasta días muerto de hambre, a veces con un solo tomate como único alimento. No sé cómo lograste sobrevivir, apenas te tenías en pie. Cada día estabas más débil, más flaco, más en los huesos.

Intentaste rebelarte, ahorrar energía, dejaste de menstruar para no derrochar ni una gota de sangre, pero ni aun así te hice caso. No te escuchaba, no me importaban una mierda tus señales de protesta. Estaba enfadada contigo. Eras mi enemigo. Y no sé por qué, porque eras un cuerpo bonito y muy agradecido. Con cualquier cosilla quedabas bien. Muchas de mis amigas me envidiaban, pero no sé, yo nunca estaba del todo satisfecha, siempre te pedía más. No quería un cuerpo bonito, quería un cuerpo perfecto, y como tú no lo eras me enfadaba.

También te machacaba a base de nicotina y alcoholes de garrafón. Durante años la vida nocturna fue mi sacrosanto refugio y tu tortura. Y tú aguantaste estoicamente todos mis desbarres, tienes que ser muy fuerte.

Hasta que un buen día te hartaste y decidiste vengarte por  mi maltrato persistente. Y apareciste de repente con un cáncer de regalo. Me estabas diciendo claro que estabas hasta los huevos de mí y que me mandabas al carajo. Sólo entonces me di cuenta de lo importante que eres y de lo mal que te había cuidado, como si fueras a estar ahí toda la vida y nunca fueras a fallarme. Qué ingenua, qué ilusa, pobre niña tonta!

Afortunadamente salimos de aquello y de la experiencia aprendí muchas cosas. La vida nos dio una nueva oportunidad, y esta vez sí la he aprovechado.

He tardado muchos años en aprender a quererte y a respetarte, a reconciliarme contigo. He tardado en entender que cuidarte a ti es cuidarme a mí. Y ahora te mimo, te dedico todos los días un montón de tiempo, te regalo una hora de gimnasia para mantenerte en forma, te agasajo con cremas, perfumes y mucho amor, te alimento con lo mejor de lo mejor, y se acabó el garrafón, solo buenos caldos, qué coño, porque tú te lo mereces todo. Y hasta te hago fotos y las pongo de perfil del guasap porque me siento orgullosa de ti. Lo que es la vida! A la vejez viruelas. A una edad en la que mucha gente empieza a enfadarse con su cuerpo porque notan que les falla, voy yo y me reconcilio contigo!

Al final nuestra historia de desamor ha terminado siendo una bonita historia de amor. Sólo espero que sepas perdonar y olvidar todo el mal que por mi ignorancia y mi mala cabeza te hice y que sigas siendo tan buen compañero de viaje todo el tiempo que nos queda juntos.

Te quiero.

Ps. Copio el enlace de la carta de Luz Gabás para el que quiera leerlo.

http://elpaissemanal.elpais.com/columna/luz-gabas-querido-cuerpo/


lunes, 3 de abril de 2017

El gran basural

Leo el último artículo de Javier Cercas, que va sobre la violencia verbal en Internet, sobre todo en las redes sociales, ese odio que parece que lo impregna y lo guarrea todo.

Copio el enlace y un fragmento del artículo:

http://elpaissemanal.elpais.com/columna/javier-cercas-el-gran-basural/

Desde que existe Internet –no digamos las llamadas redes sociales– basta con apretar un botón para enfrentarse a toda la basura del mundo: uno puede ver a defensores de los animales deseándole la muerte a un niño de ocho años, enfermo de cáncer, porque ha dicho que le gustaría ser torero; uno puede ver a un patriota de izquierdas riéndose a mandíbula batiente de una mujer (Irene Villa) a la que ETA le cortó de niña dos piernas y tres dedos en un atentado terrorista; uno puede ver a patriotas de derechas tratando de aniquilar la carrera del director de cine que quizá con más ahínco ha defendido la tradición del cine español (Fernando Trueba) porque se le ocurrió decir que no se ha sentido español ni cinco minutos. Y así hasta el infinito. O casi. Es extraordinario: a los niños les prohibimos el porno, pero no esta porquería. Aunque lo que a mí de verdad me intriga es lo otro: ¿cómo va a cambiar el mundo esta inundación de vileza permanente, gratuita y al alcance de todos? ¿Este basural ilimitado va a contaminar la vida o, por el contrario, va a ser una válvula de escape de la abyección humana, más o menos como lo es el fútbol, o como dicen que lo es?

Ya he comentado algunas veces que tengo un amplio historial de participación en foros de discusión y que he sido abundantemente insultada, maldecida y vilipendiada en todos ellos, y que mi actitud ante todo ello es simplemente hacerme la pirámide y descojonarme del exaltado en cuestión, lo cual consigue cabrear todavía más a la gente y ponerla mucho más frenética y violenta. Me da igual, nunca me han afectado las barbaridades que me dicen porque ni conozco a esa gente ni me importa un pimiento la opinión que puedan tener sobre mí.

Lo cierto y verdad es que leyendo el artículo de Cercas me pregunto si es tan cierto que Internet es un inmenso basural o más bien es un amplificador de basura. Porque no creo yo que haya tanta mierda en la red. Hombre, haberla hayla, qué duda cabe, pero no en tanta cantidad como creemos; lo que pasa es que nos pasamos la vida repitiendo una y otra vez esa basura, ya digo, amplificándola, multiplicándola...Si un imbécil escribe un tuit deseándole la muerte a un niño torero con cáncer, es eso, un imbécil que ha cagado su truño del día. Pero si durante semanas e incluso meses en todas partes se habla permanentemente del tuit del indeseable la sensación es que son miles de tuits. Y eso si además no se le pone una demanda y ya tenemos tema para rato durante meses y meses, que si el escrito de la fiscalía, que si los abogados, que si la acusación particular...

Si no les hiciéramos el caso que les hacemos y los periódicos, las radios y las teles no se dedicaran a repetir hasta la saciedad todas las chorradas que se le ocurren al tarado de turno no tendríamos esa sensación de enorme vertedero de mierda que da la red.

Y probablemente el mundo no es ahora peor que antes. Estos gilipollas han existido de toda la vida, los de los chistes de mal gusto o los brutos que amparados en la coartada de una causa noble (el animalismo, por ejemplo) sueltan barbaridades. Pero claro, antes las soltaban en su casa a la hora de comer o como mucho en la barra del bar y solo les escuchaban siete gatos que se limitaban a pensar para sí "menudo imbécil" y punto. Y ahora lo cuelgan en twitter o en facebook y ya se encargan los "indignados" de hacerle publicidad al mensaje y de que todo el mundo se entere de su existencia y lo lea.

Hace unos días supe del escándalo que se había montado por las votaciones finales del concurso Got talent. Yo no lo he seguido y no puedo opinar pero por lo visto las votaciones finales para decidir el ganador del concurso estaban abiertas al público, y una panda de trolls de Forocoches, que al parecer debe de estar lleno de subnormales, decidieron votar masivamente para que ganara el más manta de los finalistas y no el favorito del jurado y de la mayoría del público. Por lo visto lo hicieron para joder a Evaristo Mejide, no tendrían otra cosa más interesante que hacer los mastuerzos.

Y digo yo, de quién es la culpa? Quién fue el primer imbécil que se le ocurrió que fuera la gente desde sus casas la que decidiera quién gana los concursos? O quién va a ser el representante de Eurovisión. Quién fue la lumbrera que ideó este sistema "democrático" de elección? Porque eso del público es un concepto muy amplio en el que tienen cabida desde la gente más normal que vota realmente al que cree que lo ha hecho mejor hasta el que vota a Rosa de España porque le parece muy simpática y campechana o el que vota para joder a Evaristo Mejide porque le cae como el culo. Y cientos de personas que votan por razones igualmente peregrinas. Para mí está claro que el culpable de esos despropósitos es el que le da a la gente la posibilidad de decidir y no pone los mecanismos preventivos para evitar desbarres.

En fin, que sí, que Internet es el refugio perfecto para todos los pirados, resentidos y capullos que andan por el mundo, y que dicho sea de paso, siempre han andado. Lo que pasa es que ahora tienen un altavoz mucho más potente y entre todos colaboramos para que sus vómitos se reproduzcan y se hagan famosos en el mundo.  Si nadie repitiera sus chorradas y no se les hiciera ni puto caso terminarían cansándose y los demás consumiríamos mucha menos porquería virtual. Seguro.