domingo, 8 de abril de 2012

La caza del gay, by Mario Vargas-Llosa

Impagable el artículo de Mario Vargas-Llosa en El País sobre el asesinato del joven homosexual Daniel Zamudio en Santiago de Chile. Y tremendo saber que en buena parte del mundo aún hoy hay personas que mueren por esta causa.

Los que hemos vivido más o menos de cerca el sufrimiento y la desesperanza de alguien simple y llanamente por el rechazo social hacia su orientación sexual sabemos muy bien de lo que habla.

http://elpais.com/elpais/2012/04/04/opinion/1333540547_113226.html

Como casi siempre, me quedo con el final:

"Se ha avanzado mucho en la lucha contra el racismo, sin duda, aunque sin extirparlo del todo. Hoy, por lo menos, se sabe que no se debe discriminar al negro, al amarillo, al judío, al cholo, al indio, y, en todo caso, que es de muy mal gusto proclamarse racista. No hay tal cosa aún cuando se trata de gays, lesbianas y transexuales, a ellos se los puede despreciar y maltratar impunemente. Ellos son la demostración más elocuente de lo lejos que está todavía buena parte del mundo de la verdadera civilización". Gracias, Mario, por decirlo tú.

Aprovecho para soltar otra perla al respecto: una información sobre una homilía del obispo de Alcalá de Henares sobre el aborto y la homosexualidad.

Por cierto, homilía emitida íntegra por Televisión Española en la misa de la 2, el 6 de abril de 2012, por si alguien quiere escucharla en su totalidad. La información es ésta:

http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/04/07/actualidad/1333805578_322427.html

“Quisiera decir una palabra a aquellas personas que hoy, llevados por tantas ideologías, acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana, piensan ya desde niños que tienen atracción hacia las parejas del mismo sexo ... y a veces para comprobarlo se corrompen y se prostituyen. O van a clubes de hombres. Os aseguro que encuentran el infierno”.

Estupendo. Seguid así, chicos. Seguro que dios os recompensará llenando vuestras iglesias de fieles.

Sí, sí, ya sé que este mensaje va dirigido a su público y que a mí, que no soy creyente, me debería importar un pimiento lo que diga o deje de decir esta panda. Pero es que resulta que cada mes 13 mil millones de euros de los impuestos de todos, incluídos los míos, van a parar a las arcas de esta gente que en parte los usa para propagar cosas como éstas por ahí, para colmo, en la televisión pública.

Y quiero decirlo alto y claro: NO QUIERO QUE UN SOLO EURO DE MI BOLSILLO SEA DESTINADO A ESTO!!!!!

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